Carl Tunner escribió:
A Maria Agresta, soprano lírica justa, le ví una Leonora apreciable en Valencia hace unos años con Mehta. Ya se pudo comprobar en la Norma de hace 3 años en el Real, que había recurrido al procedimiento, tan nefasto como habitual, de abombar el centro, falsearlo, para intentar cantar con más anchura de la que se tiene. El resultado, falta total de flexibilidad, incapacidad para la coloratura (como pudo apreciarse en las dos cabalette) y viajes al agudo cada vez más duros y esforzados. El acto cuarto con ese tour de force para la soprano dejó bien a las claras los apuros de Agresta, que tampoco tiene ni temperamento ni material, por mucho que lo falsee, para los pasajes más dramáticos. Queda el sentido del legato y que es italiana. Igual que Meli, tenor también de extracción lírica, que en un suspiro pasó de Rossini y Donizetti a Verdi, obsesionado por inflar el centro y sonar cada vez más caudaloso, "fare la gran voce". Técnica muy somera, todos los agudos los ataca con olímpicos portamenti di sotto o a scivolo, justito de imaginación en el fraseo, pero con un timbre atractivo, italiano y esa cordialitá, esa comunicatividad propia de sus genuinos orígenes transalpinos. El mejor pudo ser Tèzier, voz sonora, pero sin brillo, sin metal. Cantó un muy respetable Balen, con legato y fiato largo, aunque sin fantasía alguna. La Semenchuk, sin graves y con agudos fáciles (Do opativo de la fermata del dúo con Manrico y agudo final de la ópera) en una franja donde el color resulta totalmente sopranil. Asumible creación del personaje con compromiso dramatico, pero faltó ese punto de garra y personalidad que se necesita para el papel fundamental y que atrapó el interés de Verdi desde el primer momento.
Benini cuidó mucho a los cantantes, como en aquellas faenas "de enfermero" de El Viti con toros sin fuerza, e intentó exponer los detalles de la orquestación de Verdi, que los tiene a pesar de los que algunos piensen, pero su labor fue, como ya ha apuntado algún forero (creo que Supermaño), totalmente destensionada, falta de brío, de nervio (excepto en la pira, lo que contribuyó al colapso de Meli), de grinta, lo que en Verdi siempre es grave y no digamos, en Il Trovatore.
Este repaso que hace Tunner, es lo que más o menos se vio y escuchó por la 2 de tve el pasado sábado.
Maria Agresta una voz agradable y con gusto para cantar la Suor Angelica o la Liu ( es lo que creo ha cantado por el Liceo ), no tiene peso vocal ni garra para cantar la Leoora u otros Verdi tan intensos
Recuerdo hace años a la buena de Cristina Gallardo Domas ( retirada bastante joven), cantando Butterfly , Liu y Bohème, pero cuando empezó con Verdi,
hizo aguas y se cascó la voz ( precisamente, eso se lo presencié en una nefasta Leonora , en Zúrich )