Carta del presidente de la ABAO a los socios:
Estimado/a socio/a, Por primera vez en sesenta y cuatro años de historia y por razones ajenas tanto a la gestión organizativa como a la dirección artística de nuestra Asociación, el pasado noviembre ABAO ha tenido que enfrentarse a una situación sin precedentes: la huelga de la orquesta contratada para las representaciones de un título de su temporada. Habida cuenta de la lógica preocupación generada por este suceso y del malestar expresado por algunas personas, en nombre de la Junta Directiva, quiero informarle de los detalles del proceso y las decisiones que, tratando de buscar el menor perjuicio posible para todos, nos hemos visto obligados a tomar. De este modo confío en que pueda usted formase una opinión al respecto. El conflicto laboral de la Orquesta Sinfónica de Euskadi (OSE) es un hecho completamente ajeno a nuestra organización y nos ha colocado en una situación compleja y de difícil solución por el escaso margen de tiempo disponible. El viernes 3 de noviembre ABAO recibe un aviso de la convocatoria de huelga por parte de la OSE para los cuatro días de función de Don Pasquale. Este aviso vino acompañado de un mensaje de confianza en la posible resolución del conflicto y el mantenimiento del programa de ensayos previsto. ABAO solicitó la comunicación oficial de la convocatoria de huelga que nos fue remitido el miércoles 8 de noviembre. Desde el aviso del día 3 la Junta Directiva inmediatamente analizó las posibles alternativas para tratar de minimizar el impacto de la huelga en el normal desarrollo de las funciones de Don Pasquale. Para ello se barajaron cuatro posibilidades: Contratación de otra orquesta. El mismo viernes se hicieron numerosas gestiones en este sentido, contactando con orquestas nacionales e internacionales. Todas resultaron infructuosas, bien porque ya tenían compromisos previos que no podían cancelar, porque tenían disponibilidad para algunas funciones pero no para todas, porque no podían llegar a tiempo para tener un número mínimo de ensayos y la dirección musical y artística no lo consideraron aceptable, o simplemente porque declinaron la participación. Cambio de fechas de las funciones. Esta opción se descartó por la absoluta imposibilidad de volver a reunir a todos los implicados en una ópera: elenco, director de escena, director musical, realquiler de la producción, disponibilidad del Palacio Euskalduna… Un encaje de ejecución imposible al que se sumaba la negociación de la aceptación expresa de los intervinientes a fin de evitar cuantiosas indemnizaciones. La cancelación de las funciones. Desde todos los estamentos de la Asociación se valoró como la peor de las alternativas posibles, tanto artística como económicamente. Desde el punto de vista artístico hubiera supuesto reducir la temporada a cuatro títulos, un duro golpe para el prestigio de ABAO y su proyecto cultural. En cuanto al quebranto económico, la cancelación de las funciones hubiera dejado a la Asociación al borde de la desaparición, por tener que asumir los gastos derivados de la propia ópera (teatro, escenografía, equipo creativo, equipo técnico, artistas, etc.), la devolución del importe de las entradas vendidas al público, y de las partes proporcionales de los abonos de socio y aportaciones de empresas patrocinadoras. Ofrecer las representaciones con acompañamiento de piano. Se valoró esta opción como la menos perjudicial para los intereses de los socios y socias a la vista de las circunstancias, y trabajamos para traer un maestro de prestigio que pudiera ofrecer una función de calidad. Esta opción contó con el respaldo de la dirección musical y artística. Se decidió trabajar en una doble vía. Por un lado, posibilitar que en el caso de suspensión de la huelga las funciones pudieran desarrollarse normalmente con la OSE. A tal efecto, se continuó con el plan de ensayos previsto, incluido el ensayo general el 15 de noviembre.
En paralelo, para evitar la cancelación y asumiendo los costes adicionales, se contrató al maestro James Vaughan, pianista de reconocido prestigio de la Scala de Milán y de la Ópera de Cámara de Viena, para hacerse cargo de las funciones del sábado, viernes y lunes; y al maestro Diego Mingolla, colaborador del Teatro Regio de Turín, para la función del martes ya que el maestro Vaughan no podía hacerse cargo de esta función por resultar incompatible con sus compromisos previamente adquiridos. El viernes 17 de noviembre, víspera del estreno de Don Pasquale, se confirmaron los peores presagios con la no desconvocatoria de la huelga por parte de la OSE. Ese mismo día ABAO dio cuenta de la situación y de la decisión de ofrecer la representación con acompañamiento de piano a través de su web y de las redes sociales. Además a fin de mantener totalmente informados tanto a los socios y socias, como a las empresas e instituciones colaboradoras y el público en general, al día siguiente, sábado 18 de noviembre, comparecí en el Palacio Euskalduna al inicio de la primera función para explicar la situación, al tiempo que se envió un comunicado. En definitiva, ABAO se ha visto involucrada en una situación ajena a nuestra Asociación, pero en la que hemos resultado ser los principales damnificados, tanto desde el punto de vista artístico como desde el económico. El menor coste incurrido por la no participación de la orquesta no ha sido suficiente para paliar la suma de los gastos operativos, de la contratación de los maestros pianistas y, especialmente, del descenso en la venta de entradas. Algunos socios y socias han manifestado su disconformidad con esta decisión, por lo que han solicitado la devolución de la parte proporcional de su abono. Atender esta petición y, obviamente, hacerla extensiva a todos los implicados por un criterio de equidad, sería desde el punto de vista de la gestión empresarial totalmente inviable e irresponsable. El socio o socia de ABAO, al igual que el de cualquier otra entidad, participa de los buenos y los malos resultados y sufriría a posteriori las consecuencias de esta decisión. En este caso, la devolución, que además no se encuentra en la casuística de los supuestos contemplados en las condiciones de venta, tendría que haber sido financiada por los propios asociados, que se benefician de los impactos positivos pero también se ven afectados por las pérdidas derivadas de su actividad. Como presidente de ABAO confío en que esta exposición de argumentos merezca al menos su consideración. Puedo asegurarle que todas las decisiones se han tomado con la independencia que nos permite nuestra organización tratando de evitar confrontaciones innecesarias y seguro perjudiciales y sobre todo buscando la mejor solución posible en beneficio de los socios y socias. Desde la Junta Directiva queremos mostrar nuestro agradecimiento tanto por los mensajes de apoyo y respaldo, como por las sugerencias y críticas que durante estos días hemos recibido y que han sido objeto de atención y respuesta personalizada. También queremos agradecer la comprensión mostrada por la mayoría de los socios y socias de ABAO. Asimismo, deseo informarle de que la ópera Manon programada para el próximo enero se llevará a cabo en condiciones de absoluta normalidad, con orquesta, aunque no sea con la OSE como estaba planificado en el programa de la temporada. Le mantendremos puntualmente informado de los detalles de la alternativa. Agradezco su atención y quedo a su disposición. Juan Carlos Matellanes Presidente de ABAO-OLBE
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