¡Qué Carmen más burra!
Pero me ha gustado mucho en líneas generales. Creo que como se dijo ya del montaje de Moisés y Aarón de Castellucci, puede considerarse como un acontecimiento el que el regreso de Carmen al escenario del Real haya sido de la mano de esta producción que ya ha despertado muchas reacciones en Estados Unidos, Suiza, Colombia, Holanda, Italia, Noruega, Bélgica, Irlanda, Francia, Portugal y por supuesto en muchas ciudades españolas.
En 1999, y en su reposición en el año 2002, tuvimos la oportunidad de ver el montaje de Emilio Sagi en nuestro teatro. Si lo recuerdan, se trataba de un bellísimo montaje conservador y espectacular, que impactaba en vivo. Yo lo vi en la reposición, cuando la producción había sido mejorada. Desde entonces, la gitana no volvió al Real. En 2005, José Luis Moreno la programó en la plaza de las Ventas con un montaje vistoso pero kitsch, pero con la gran Denyce Graves como Carmen. Luego el Teatro de la Zarzuela la programó hace tres años en castellano, en -valga la redundancia- formato de zarzuela. Pero ya era hora de verla de nuevo en nuestro gran teatro.
Puedo entender, pero no compartir que el Real haya introducido cambios en la puesta en escena ante las "ofensas" que un sector del público cree que se cometen a nuestra bandera. Sí creo que es interesante este montaje que cuestiona y destruye los iconos de la España cañí , como el toro de Osborne. Y creo que Bieito consigue actualizar (pese a que esta versión ya tiene casi veinte años) la historia de Carmen y llevarla a casi nuestra época de forma incontestable, mostrando que aún tiene vigencia.
He asistido los días 21 y 24. En ambos, el público, pese a los escándalos, dio muestras de haber disfrutado del espectáculo. El 21 era función de sábado, con un público joven muy entusiasta, y la función de hace unas horas aplaudió con normalidad pese a algún alboroto en plantas superiores. Pero no he visto a gente escandalizada, aunque un amigo me ha asegurado que sí.
Calixto Bieito retrata a los legionarios como personajes aterradores, con las hormonas levantadas, siempre dispuestos a la violación y al pillaje, al maltrato y la violencia. A los protagonistas como seres viviendo en un insufrible mundo choni y garrulo sito en un lugar alejado y desértico, posiblemente cercano a Marruecos. Y Lilas Pastia es el coro que introduce la tragedia con su presencia en todos los actos. Don José es un militar anodino que se convierte en un enfermizo maltratador y Carmen es una mujer sensual y muy sexual, pero fuerte e independiente, también atormentada.
Marc Piollet dirige bien a la orquesta, pese a su dirección no tiene la personalidad que hace 3 años mostró en el Tristan de Sellars. Los cantantes en general han estado bien, con las Cármenes de una
Anna Goryachova a seguir y una
Gaëlle Arquez bella y buena actriz, un
Francesco Meli de buena voz pero no suficiente adaptación al personaje, un
Kyle Ketelsen digno (que cantó también el torero en 2002 con Sagi) y una
Eleonora Buratto que hizo una gran Micaëla.
No sé cuál ha sido su experiencia, pero espero que ahora si lo desean la compartan en este hilo.
Aquí tienen una descripción más detallada por si quieren saber más sobre mis impresiones.
Muchos ya la habrán visto, pero el que no, que no se la pierda. Esta es la Carmen de nuestro tiempo.