Finalmente, España se lleva el bronce, al ganar a Rusia por 8 puntos.
Durante muchos minutos España jugó sus mejores minutos del torneo ante un equipo fuerte, antes de embolicarse en el último cuarto, con Scariolo más pendiente de sus pacientes geriátricos, que del partido.
Bienvenida sea la medalla de bronce, y ahora a ver que hacemos con el Mundial de China en 2019, las ventanas FIBA, y toda la parafernalia.
Ricky Rubio: 6,5. Arrancó bien el campeonato, y hasta dio la sensación que iba a olvidar sus problemas en el tiro, pero la cabra tira al monte, y en los últimos partidos del campeonato, volvió a su tradicional papel como Tiro Loco McGraw.
Sergio Rodríguez: 8,5. El mejor jugador de España en este campeonato. Además de su dirección, fue absolutamente determinante por sus canastas de dos y de tres. Si además ya hubiera defendido bien, habría sido la repanocha.
Guillem Vives: s.c. Scariolo no le ha dado bola. La verdad es que para este viaje, no hacían falta alforjas.
Juan Carlos Navarro: 3. El jugador que hemos visto en el Barça. Simplemente, no debería haber estado aquí, su sitio era en su casa, retirado. Y, como homenaje, pues le podríamos haber montado un partido contra una selección mundial de la FIBA.
Fernando San Emeterio: 5. El hombre es honrado a carta cabal, y lo da todo en cancha. Lo que pasa es que ese todo no es suficiente. Enternecedor como bajaba las piernas, y apretaba la mandíbula, antes de ser chuleado por turcos, alemanes, eslovenos, rusos,...
Alex Abrines: 0. Tuvo un arañazo en una rodilla, y dejó de jugar. Otra vez. Si yo fuera el próximo seleccionador, Abrines sería el último jugador español que me llevaría a un campeonato.
Joan Sastre: 6,5. Ha aportado en defensa, pero ha estado demasiado tímido en ataque, especialmente en el tiro exterior.
Juancho Hernángomez: 7,5. La mejor noticia para el baloncesto español en este Europeo. Desparpajo, ganas, defensa, ataque,... En realidad, ha estado limitado más por su propio coach que por los rivales. Que San Emeterio haya jugado más minutos que Juancho, es un disparate.
Pierre Oriola: 7. Buena aportación también de Oriola, un jugador todavía joven (24 años), que está en crecimiento y podría ser importante para la selección en el futuro. Su problema, claro, es que no llega a la altura del ex-montenegrino Mirotic, así que dependerá de las decisiones del amigo Nicola.
Willy Hernángomez: 6. Ha ido de más a menos, pero su mejor defensor ha sido también Scariolo, que le ha marcado inmisericordemente. Debería haber jugado más minutos.
Marc Gasol: 7. Un gran cuarto frente a Alemania, y un par de partidos buenos, incluyendo el del bronce, pero claramente por debajo de lo que se debe esperar de un jugador que está considerado entre los 25 mejores de la NBA.
Pau Gasol: 8. Se ha confirmado lo que se dejaba entrever tras su temporada en los Spurs, y ya no es el mejor jugador FIBA. Ha bajado un par de escalones, sin duda debido a sus 37 años, pero sigue siendo muy importante. ¿Jugará en 2019?. Probablemente, no.
Sergio Scariolo: 5. Aprobado raspado. No ha sabido mezclar a los Gasol, no ha aprovechado bien a los Hernángomez, su amor por el geriátrico ha sido un problema para el equipo,... Pero hemos ganado el bronce, después de todo. Si Luca Doncic hubiera elegido jugar por España, con Scariolo habría sido suplente de San Emeterio. Con eso está dicho todo.
Adiós a los grandes campeonatos de selecciones hasta 2019. Pero si tienen hambre de baloncesto, y quieren ver a un equipo español que, además de ganar, juega como los ángeles, no se pierdan el Mundial Femenino de Canarias, el verano que viene.
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