calaf74 escribió:
Señora Despinetta, es difícil no emocionarse con ese final. Ayer, mientras lo cantábamos, pensando en que quizás pasen muchos años antes de poder volver a cantarlo, le confieso, ahora que no me oye el maestro, que la emoción me obligó a tomar algunos fiatos de más. Viva la música.
Es difícil, lo sé; aparte, es una ópera que me gusta y mucho; pero es que fue muy especial, se me saltaron las lágrimas por cómo había sonado la función, por cómo llegaba ese clímax y cómo el coro (¡perfectos, enhorabuena!) cerraba con ese "¡Aleluya!". Siempre será poco lo que diga; varios estuvimos y doy fe de la emoción vivida. Emoción que nos transmitieron y notaron: les braveamos.
¡Que no falte esa emoción!