Dengakuman escribió:
HOLA HAMIJOS
Ya he dicho que la técnica de emisión de Jadlowker tenía importantes rotos, al menos si consideramos todo el repertorio que abarcó. No era un tenor precisamente largo ni tenía una voz campaneante, con frecuencia cantaba de gola, etc. Pero si me dan dos segundos, les digo dos Otellos "referenciales" que cantaron con peor voz que el letón. ¿Le pasó factura cantar roles dramáticos? Sí, ¿y a quién no? Slezak no tardó demasiado en convertirse en caricatura de sí mismo, como es fácil comprobar en sus discos de madurez. Podemos decir que era unos incautos presuntuosos, o podemos alegrarnos de que aportasen su técnica y su instrumento a un trecho tan cabroncete del repertorio.
Se me había olvidado el Cuius animam, ya ve usté. El hecho era y sigue siendo que Caruso esquivó Il Barbiere, como habría esquivado cualquier ópera que dejase tan al descubierto su modesta agilidad (ya queda bastante expuesta, por ejemplo, en las cadencias de La donna è mobile). No me parece algo como para echarle en cara, desde luego: ni tenía coloratura ni falta que le hacía. Pero, joder, ya es bastante que Caruso redefiniera el tenor normal, como para que redefina también el tenor absoluto, que es un concepto estrictamente ottocentesco.
Y aclaro: para mí un tenor absoluto es el que abarca el repertorio drammatico y el di grazia con una razonable corrección estilística y vocal. Por ahí pillamos a Jadlowker, que como dramático fue al menos solvente; a Roswaenge, bastante más airoso que Slezak y Caruso... y a algún par más que no citaré para que no se le salte la hiel. Si para usted absoluto es el que canta de Mozart a Wagner, de nuevo la cagamos con Caruso (con Slezak no, claro).
Me queda la duda de qué es un "dramático de los nuevos tiempos" para Carl Tunner. Porque Jadlowker ya iba desfasado con la actualización de software de finales del XIX, caracterizada por la voz de trompeta y el fraseo no necesariamente ágil (Mayor Contributors: Tamberlick, Guasco, Fraschini, Tiberini... Tamagno... Escalaïs, Paoli, De Muro, Viñas, Slezak). Espero que no se refiera a la actualización de Caruso, porque entonces su afirmación es una pura tautología.
Volvemos a lo de antes y a las contradicciones.
Estamos en el S. XX. El repertorio ya no se acaba en Meyerbeer. No estamos hablando del tenor
ottocentesco. Estos señores cantaron repertorio protorromántico, romántico, romántico tardío y de
Giovane Scuola. Con ese campo, se puede optar por lo dramático o lo lírico. Estos señores cantaron las dos cosas, lo cual quiere decir que se podían mover por lo amoroso, lo altisonante, lo heroico, lo elegíaco, lo trágico... No cuenta tanto enumerar los papeles como la amplitud técnica, vocal y expresiva que requiere ser capaz de cantar Tamino (o Ferrando o Elvino) y Tannhäuser (o Álvaro). Aquí lo que importa es ser capaz de cantar un spianato recogido y ligadito en una tesitura incómoda de tenor lírico y también poder afrontar una escritura pesante en el paso o con agudos di forza.
Por cierto, si sigue usted con dudas sobre Rosvaenge, le aconsejo audición urgente del Hüon de "Oberon". Éste, sí, tenor heroico de agilidad.
¿Qué otro papel de Rossini aparte de Almaviva cantó Jadlowker? ¿Cómo puede usted comparar su Otelo con el de cantantes que lo grabaron completo? Seamos rigurosos.
Ya desde mediados del Ochocientos los tenores de emisión
di forza (el nuevo tenor dramático) se empezaron a alejar de Rossini y para finales de Siglo este compositor casi dejó de cantarse (excepto Arnoldo: el papel precisamente con que se dejó de cantar Rossini como se cantaba Rossini en carrera del compositor). Insisto: cuando hablamos de cantantes modernos Rossini es un caso aparte porque desdeñaba la escritura
di forza, imprescindible en cantantes que quisieran cantar Radamès o Stolzing.
Puede usted citar tranquilamente a Lauri-Volpi. Vocalmente hay razones para ello. En cuanto al intérprete, cuestión que sigue usted evitando clamorosamente en el caso Jadlowker, ya hay más dudas. Como le he dicho, aunque se haga el sueco, el tenor dramático también se hace.