Voy a hacer una propuesta que no es perfecta pero intenta conciliar, en lo posible, todas las posturas. Si una mayoría de los foreros que se han manifestado su interés en participar la aceptan seguiríamos, si no pues lo dejaríamos porque contentar a todos con sus puntos de vista y sus gustos es imposible
Se harían primero dos subcampeonatos:
En el primero, que podríamos llamar Literatura Clásica, abordaríamos la Literatura de ficción anterior al S. XX con cuatro apartados
- Novela
- Teatro
- Poesía
Aquí se podría se añadir un apartado de "inclasificables" si se viera necesario.
En cada género se podrían proponer hasta 12 obras. Las dieciséis más votadas se enfrentarán entre sí en el modelo de copa hasta llegar a un finalista por género.
En el segundo, que se llamaría Literatura Contemporánea habría estos subgrupos
Novela de suspense/negra/policiaca
Novela de ciencia ficción/Fantasía e histórica
Novela romántica y erótica
Novela de terror y humor
Novela de aventura
Cajón de sastre
Poesía
Teatro
Sí, ya sé que es arbitraria la clasificación y que no gustará a muchos, pero algo hay que decidir que no se puede contentar a todo el mundo.
Cada forero podría aportar hasta 5 títulos por género. Se elegirán los dieciséis títulos más votados y se irán enfrentando entre sí hasta llegar a un finalista por género.
Gran final
Los dos finalistas de cada uno de los géneros del campeonato clásico y el campeón de los ocho grupos más del subcampeonato de novela del s. XX
así los dos mejores segundos puestos de estos ocho géneros se enfrentarían hasta sólo quedar uno.
La inclusión de las novelas propuesta en cada uno de los géneros queda a criterio de cada forero y la supervisión del supertacañón y propongo que sea delaforce. Tiene que haber un juez porque si no nos volveríamos locos.
Si veo que la mayoría acepta estas normas a final de semana empezaremos a proponer títulos
He editado porque me dice mi asesora numérica que no salían las cuentas, que repase ella y si no está bien que ponga, por favor, cuantos tendrían que ser para que salgan las cuentas