Vamos allá, que ya he vuelto de mi viaje:
Le Gouverneur escribió:
No sólo habla bien mamoncito de la dirección de Keilberth, todos los expertos wagnerianos también coinciden. Respecto a su comparación con Kna si hiciéramos una estadística entre los expertos, mayoritariamente gana Kna en Die Wälkure, Keilberth en Siegfried y empate en las otras dos jornadas. Son enfoques diferentes, difícil hablar de quien está mejor. Lo que sí me produce sobresalto es leer que Keilberth está menos inspirado, no en un fragmento determinado que puede haberlos, sino así, en general... pues si llega a estar inspirado se produce una implosión del universo.
Bueno...los expertos wagnerianos pueden decir lo que quieran, claro. Pero desde mi no-experta visión, no hay ni punto de comparación entre Kna y Keilberth. A éste le falta inspiración por todas partes, sobre todo en los momentos más trillados de la tetralogía. Su punto más bajo, para mí, es la marcha fúnebre de Sigfrido, que es de un nivel bastante mediocre.
A Keilberth, no nos engañemos, lo aúpa el sonido. Cuando había sus tetralogías de 1952 y 1953 en el mercado (sin sonido estéreo) nadie hablaba maravillas de él. Con este sonido, desde luego, apreciamos mejor sus virtudes, pero no deja de ser un director experto y competente y no un grande como Kna (que tampoco me parece lo más de lo más, pero bueno) o Krauss, que está varios cuerpos por encima.
En cuanto a la implosión del universo...bueno, eso es mérito también de lo inspirados que estaban los cantantes (sobre todo Varnay y Windgassen en ese Siegfried, que por algo Testament vendió primero esta segunda jornada, en vez de empezar por el oro, que dicho sea de paso es incomparablemente inferior al de 1956 o 1957, no pasando de ser una buena función sin más).
Si esta tetralogía merece un puesto de honor entre las tetralogías grabadas es, en primer lugar, por el sonido, en segundo lugar, por ese Siegfried y en tercer lugar por ser bastante homogénea en calidad, sin muchos agujeros negros. Pero no es la mejor tetralogía, ni mucho menos.
Y, desde luego, si el Anillo de 1955 es grande, lo es también por Hotter. Porque el Wotan de Hotter es incomparable.
Pero este Hotter, el de 1955, querido Legou, está visiblemente peor que en otras ocasiones. Que es siempre un "peor" dentro de la excelencia? De acuerdo. Pero, p. ej., en esta despedida de Wotan, creo que está muy por debajo del 53 y del 56 (ya no te digo del 42, que arrasa con todo). Como lo está su Wotan del Oro (la pareja que hace con el Loge de Suthaus en 1956 y 57 es infinitamente mejor). Mejora mucho en Siegfried, pero, como conjunto, este Wotan es sobresaliente, pero no de matrícula, como en otras ocasiones.
Así lo veo yo, al menos...
PD.- "en gran estado vocal, fresco, sin problemas de fatiga ni tiranteces arriba ", dice Barrio? Pues yo le noto momentos de tensión extrema (y no sólo en el final de la despedida, comiéndose -como siempre- esa sílaba).