Carlo Bergonzi
Tenor italiano nacido el 13 de julio de 1924 en Vidalenzo di Polesine Parmense, Italia. A la edad de seis años concurrió por primera vez a la ópera con sus padres, donde vio “Il Torvatore”. A la mañana siguiente, sus padres lo encontraron en la cocina cantando y actuando el aria “Di Quella Pira” con los artilugios que en la cocina encontró. Siendo niño cantó en coros de iglesias e interpretó algunos papeles infantiles en la Ópera de Busseto. A los 14 años realizó una audición para el maestro Edmondo Grandini quien clasificó su voz en la cuerda de barítono, y se ofreció para ser su maestro.
Bergonzi se trasladó a Brescia donde comenzó sus estudios con el maestro hasta que estos se vieron interrumpidos por la segunda guerra mundial, ya que fue detenido por los alemanes debido a sus actividades anti-nazi en un campo de concentración. Cuando finalizó la guerra, volvió a Italia donde continuó sus estudios en el Conservatorio “Arrigo Boito” en Parma. Todavía considerado como barítono, estudió con Ettore Campogalliani y luego de su graduación debutó como Shaunard en “La Bohème” en 1947.
Al año siguiente de su debut, en 1948 cantó el rol de Fígaro en “El Barbero de Sevilla” de Rossini en el Teatro de Lecce. Aunque su carrera como barítono era elogiada y cantaba asiduamente roles protagónicos, él estaba convencido que su voz era de tenor. Usando lo que había aprendido en el conservatorio, grabaciones de otros tenores, como Caruso, Schipa, Gigli y Pertile, y lo que recordaba de sus actuaciones con Schipa y Gigli, investigó en su técnica, esencialmente en lo que se llama la “zona de pasaje de la voz” apoyándose en una sólida base respiratoria.
Así, al poco tiempo de un arduo y solitario trabajo, logró llegar con fluidez y naturalidad a la zona aguda propia del registro del tenor. De esa forma, en 1951 hizo su debut como tenor cantando el rol protagónico de “Andrea Chenier” de Giordano en Bari, Italia. Pronto empezó a interpretar únicamente roles de tenor, destacándose: Riccardo en “Un Ballo in Maschera” y Alvaro en “La Forza del Destino”. Para conservar la flexibilidad de su voz, cantó papeles más ligeros, como Nemorino en “L’elisir d’amore” y Nero en “L’incoronazione di Poppea”. Hizo su debut en el Teatro alla Scala de Milán en 1953 donde estrenó el personaje principal de “Mas’Aniello” de J. Napoli. En 1955 debutó en la Ópera de Chicago, y al siguiente año hizo su debut en el Metropolitan Opera de Nueva York como Radamès en “Aida” de Verdi. Su debut en el Coven Garden de Londres fue como Alvaro en “La Forza del destino” en 1962. Desde entonces se convirtió en uno de los cantantes más reconocidos en los más importantes escenarios de ópera del mundo, no sólo por su voz sino también por su línea de canto y fraseo verdiano. Mantuvo su versatilidad a lo largo de su carrera, alternando roles líricos y spinto, incluso algunos roles del verismo. Fue un excelente actor vocal, y cantó cada uno de los roles que interpretó, con los colores que sintió que estos demandaban.
Durante la década de 1980, se dedicó a realizar recitales además de convertirse en un reconocido maestro de canto, haciendo énfasis sobre todo en la técnica vocal y respiratoria. Creó una escuela de canto en Busseto y tuvo un papel fundamental en el “Concurso Internacional de Voces Verdianas”.
A lo largo de su carrera grabó la mayoría de los roles verdianos. En 1976 grabó para el sello Philips, las más importantes arias de óperas de Verdi, grabación que ganó varios premios, entre ellos, Premio del Disco Alemán (Deutscher Schalplattenpries), Premio de la Crítica Discográfica Italiana, y el Premio al Album del Año de Stereo Review.
Audiciones:
En la "pira" vediana
Oh, tu che in seno agli angeli
En Mefistofele
Como Nemorino
En L'Africana
Sus fotos "privadas":
Con barbita
En su 1ªcomunión
De "palmero"
"¿Me se oye bien"?
"¿Qué pa...qué pa...qué pasa?"
En una fiesta de disfraces
En otra fiesta (¿no tenía otro disfraz?)
"El cura de el exorcista"
"la foto pa' la novia"
"Tal como eramos" , con la Moffo
Bueno, ahora a debatir...