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EILEEN FARRELL: Wagner
Cualquier texto que lean sobre
Eileen Farrell les dirá que es una lástima que nunca cantara
Wagner, que su voz era perfecta para Isolda y Brunilda. Ciertamente, Farrell nunca cantó un rol completo de Wagner en escena, aunque su voz se lo permitía. La razón no es un misterio: la propia Farrell no se sentía especialmente atraída hacia a la obra de Wagner y decía (literalmente) que, existiendo Birgit Nilsson, ella no tenía nada que hacer en ese repertorio.
Curiosamente, a pesar de todo esto el legado discográfico wagneriano de Farrell es notable (teniendo en cuenta que no fue una cantante que frecuentara el estudio de grabación). Nosotros vamos a contar con tres fuentes básicas:
En 1949,
Leopold Stokowski, gran amigo de la cantante, se decidió a grabar los
Wessendock Lieder con Farrell como solista. La estuvo preparando durante meses. El resultado es sin duda excepcional, con Farrell en su apogeo vocal. Se incluye además el duo final de
Siegfried con Farrell acompañada de
Set Svanholm.
Grabación de un concierto en directo que se produjo en 1951 en Nueva York. A la fanstástica batuta de
Victor de Sábata se une la voz de Farrell para cantar, entre otras cosas, el Liebestod y la Inmolación de Brunilda. Un disco
imprescindible.
Este raro disco contiene un concierto que data de 1961, mucho más tarde en la carrera de Farrell.
Leonard Bernstein, un gran amigo de la cantante, dirigía piezas de Wagner (algo bastante raro en el repertorio de Lenny, todo sea dicho). En el programa encontramos, de nuevo, a Farrell cantando los
Wessendock Lieder y la Inmolación de Brunilda.
Este es básicamente el testimonio discográfico que tenemos del Wagner de Farrell, pero me reservo una sorpresa para el final
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