Al final me animé a ver Butterfly a ver qué tal. Debo decir que no lo recomiendo. Una producción tremendamente low-cost, por el módico precio de 80 euros por butaca.
El setup es parecido al de una ópera en versión concierto, la orquesta detrás de los cantantes, y ponen un poco de escena por delante. Bueno una escena que parecía de función de colegio. La orquesta es reducida (unas 20 personas), y utilizan micrófonos para amplificarla. El reparto bastante mediocre también (salvo Pinkerton, que todo hay que decirlo). Llevaban micros también, lo cual resta mucho.
La función era a las 12 de la mañana (por ahorrar supongo). Tampoco hubo intermedio, dos horas y cuarto del tirón.
Lo peor de todo que no hubiera pantalla con el libreto. Te daban un libreto físico que podías seguir (creo que fui la única persona en ese teatro que siguió el libreto), pero a veces la iluminación era tan pobre que era imposible leer nada.
En fin, un fiasco total. Cualquier concierto que tenga marca “Fundación Excelentia” lo evito como la peste.
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