Mire Sr. Wanderer, respeto su opinión pero no la comparto. A mí la "dimensión escénica", últimamente, la mayoría de las ocasiones, lo que hace es aguarme la función y ponerme de muy mal humor. Ahora va resultar que Otello de Rossini es una obra habitual... pero sin embargo se quejan de que ponen Nabucco "porque está muy visto" y resulta que el último escenificado e el Liceo fue hace 21 años. El que se interpretó en 2006 fue en concierto con Guleghina, Nucci, Di Donato y Santi, que a mí sí me parece justifican la falta de escena, aunque para excepcional el Macbeth de Muti en 2001 con las huestes de La Scala. De lo mejor que he visto en mi vida y no eché de menos la escena. EN un teatro de repertorio centroeuropeo se programan 35 ó 40 óperas al año, en uno de Stagione, 9 ó 10, por lo que programar obras en concierto, bien para traer a grandes artistas o presentar obras poco habituales, me parece acertadísimo y resulta que luego el público dicta sentencia y, a pesar de todo, guste o no a algunos, suelen ser los éxitos de cada año. El Tristán de Gergiev me pareció un error, porque este hombre y sus huestes hace tiempo que se embarcaron en el mundo del bolo y hacer caja, de oca a oca, saltando de compositor en compositor y de ciudad en ciudad.
De acuerdo (ya lo he dicho mil veces) que el Liceo no es un teatro adecuado para barroco y tampoco para Mozart e incluso para Rossini, pero en la presentación de ayer no hubo turno de ruegos y preguntas, por lo que no pude preguntar por un escenario alternativo en Barcelona para esos repertorios. Pero en fin, tampoco es un recinto apropiado La Scala y el MET y también programan barroco. Y aún teniendo en Madrid La Zarzuela, siguen programando Händel en el Real...
De acuerdo con Mr. Hentzau en cuanto a Lezhneva. Hace no tanto había que tomar mucho más colacao y demostrar muchas cosas para ser considerado excepcional, pero ahora las cosas están como están.