Je.

Por cierto, en Roma antes de empezar, también ponían subtítulos de prueba, pero en este caso de Lohengrin y la gente que llegaba estaba confundidísima: «¿quién es el Protector de Brabante?»

¿En España también ponían entrevistas (pregrabadas) a Tcherniakov, Lissner y demás en el descanso? En Italia les ponían subtítulos en inglés (también a Gatti cuando habló al empezar para dedicar la sesión a Mandela, aunque ahí la interrupción por el aplauso descuadró los subtítulos).

Gatti junto a los abucheos también estuvo fuertemente ovacionado. Y creo que no se le puede negar que ha hecho un trabajo minucioso para conjuntar lo musical y lo escénico, lo que es de alabar. En la elección de los tempos, más que caprichosos yo siempre le he encontrado una justificación dramática.



No puedo estar en más desacuerdo. Se le podrán poner pegas a Damrau, también se puede hablar de numerosas virtudes, (vocalmente ha sido claramente la mejor) pero de lo que no hay duda es de que ha construido un personaje de tomo y lomo. Otra cuestión es si conectamos con esa construcción de esa Violetta neurótica y adictiva o si esta tiene que ver con el personaje creado por Verdi. Evidentemente la Violetta de Verdi es diferente, su enfermedad es otra y nos aparece como una mujer más fuerte que realiza un gran sacrificio. Pero si profundizamos un poco en este último aspecto, hay también que reconocer que el sacrificio es también un signo de debilidad al dejarse morir sin luchar por su amor, real y sincero. En esta producción se trabaja en esa línea y es la sociedad y los que rodean a Violetta la que empujan a una mujer débil al abismo, sin necesidad de tisis, como tantas veces hemos vivido en personajes famosos y no tan famosos en el siglo XX. En esta producción hay una conexión con Marilyn en el inicio, y el final de ambas es bastante parecido.

Dentro de poco nos colgarán en el foro la crítica de la Grisi, plena de argumentos para exponer lo inadecuado de la vocalidad de Damrau y el crimen que ha cometido junto a Tcherniakov. Pero por detrás quedará un inmenso trabajo músico-teatral que desde mi punto de vista ha sido muy interesante.

Ocurren continuamente cosas en escena y no todo me ha convencido, estoy un poco de acuerdo en la situación un tanto extraña de la presencia de Alfredo en el inicio del segundo cuadro del segundo acto. Sin embargo los momento de cocina sí los he visto interesantes, en el sentido de que cuando amasan juntos Damrau y Beczala refleja muy bien la felicidad que están viviendo esos días y cuando le habla el padre Alfredo se pone a cortar en la cocina sin sentido buscando una actividad que representa lo poco que quiere escuchar lo que le están contando, hasta que se desmorona y comienza el diálogo. Puede causar cierta hilaridad en algunas ocasiones, en el cine hubo murmullos cuando Damrau abre la caja de los merengues (lo que le faltaba dijo uno con cierta maldad hacia su físico actual), nos pueden resultar algunas cuestiones chocantes, pero no se puede negar un trabajo teatral serio definiendo los caracteres de los personajes, incluso asumiendo que ciertos enfoques sean muy discutibles.

http://www.ilcorrieredellagrisi.eu/2013 ... -pan-gial/

Lo esperable.

Lo del mensaje de facebook de Beczala me parece un error. Como si él no hubiera sabido de antemano lo que supone una Traviata en Milán el 7 de diciembre. Un mensaje así el día después de haberse llevado unos abucheos es una rabieta más bien impropia de un profesional, y no digamos ya de su nivel.

Aunque lo comprendo, es sin duda un error (sobre todo hacerlo tan en caliente y con más representaciones por delante). Ha comentado algo más:

Bueno, no creo que nadie abucheara al señor Beczala por sus desventuras escenicas, sino mas bien por su canto desguarnecido, sin apoyos, desagradable... Pensaba que le ocurria algo, que tenia algun problema de salud... Luego me di cuenta que simplemente ese es su estado vocal en estos momentos. Lucic, siendo generosos, correcto. Al menos se daba cuenta que estaba cantando Verdi, e intentaba obrar en consecuencia. Damrau fue de menos a mas: un primer acto rayando en lo impresentable, y terminando mucho mejor, proporcionando el unico momento de emocion y verdadera tension teatral de toda la velada.

El director de orquesta es mejor que busque otro empleo. Si creia que estos eran los tempi correctos para una Traviata, por incapacidad. Si cedio a presiones del regista, por pusilanimidad.

Un profesional que cobra tanto por función cante bien o peor, tiene que apechugar con posibles broncas o silbidos y no, amenazar con no cantar màs en alla Scala.
Beczala lleva ya cierto tiempo, bajando nivel cuando canta Verdi (por ej.su Duca de Paris hace dos temporadas y su Riccardo del Ballo en Zurich tambièn hace dos temporadas , tuvieron bastantes deficiencias vocales ).
A ver si en la próxima función de su Alfredo en Milano, hace como Alagna hace unos añitos y se larga del escenario si le vuelven a protestar!

¡Efectivamente, tucker! Beczala lleva dos o tres temporadas que no son digamos lo mejor de su carrera, y no solamente con Verdi, el Rodolfo en Salzburg 2012 tampoco fue muy allá... esperemos que solamente sea un periodo de crisis.

El comentario adicional sobre que él no estaba de acuerdo con la dirección de escena me parece que empeora las cosas en vez de arreglarlas. Beczala, que digo yo que a estas alturas podrá elegir las producciones en las que aparece, hace declaraciones (esta no es la primera) diciendo que no le gustan las puestas en escena "modernas", y sin embargo luego no tiene problema en comparecer en una Traviata con dirección de Tcherniakov, que desde el minuto cero se sabía que no iba a ser muy tradicional. Podrá gustar o no lo que hace Tcherniakov pero yo todavía no le he oído quejarse en público de la línea o de los agudos o de las capacidades como actor de su tenor protagonista. Y lo de que han de contratar a un italiano es más bien absurdo: como si él hubiera sido el único foráneo ayer, y como si ayer hubiera sido la primera vez que él ha cantado en La Scala.

Vamos, que bastante mal.

Ayer, supertradicional. Nada que ver con lo que nos perpetró aquí.
Y sigo diciendo que me pareció injusto el abucheo.

Ni he visto ni escuchado esta Traviata Milanesa, pero de lo sucedido, leído y lo que me han comentado, puedo sacar algunas conclusiones:

-Ya Gatti fue abucheado en el Don Carlo que sí presencié en directo y no me gustó nada. Y eso que esta obra tiene escenas y momentos a los que le puede ir mejor el recrearse en el "desbrozamiento analítico de la partitura". Sin embargo, sí le ví un buen Simon en Viena hace 11 años. Pienso que a este hombre tanto halago por parte de los Wagnerianos (algunos) a su Parsifal le ha confundido.

-Lo que leo sobre Beczala no me sorprende. Y Verdi es mucho Verdi. Dejando de lado, lo sosito que es el hombre, la falta de entusiasmo y mínima spavalderia tenoril que exhibe, está claro que está cada vez más forzado y fuera de sitio. Ya me convenció escasamente su Duca en Paris. El algodón no engaña y menos en un papel más virtuosístico como Alfredo. Sí me sorprende que no abuchearan a Lucic. Este señor sólo tiene sonoridad y voz de barítono.

-Sigue soprediéndome que un sopranino ligero como Damrau esté floja en el acto primero, que es donde debería lucir sus armas. En asuntos vocales cada vez nos situamos más ante "el mundo al revés"

Decepcionante Traviata en la Scala .
Diana Damrau por debajo de sus posibilidades, el primer acto fatal, creo que estuvo condicionada por las tonterías que tuvo que hacer en escena.
Zeljko Lucic correcto, es un baritono que siempre me ha gustado, pero creo que está de horas bajas.
Piotr Beczala mal cantando y mal haciendo las declaraciones que hizo.
La puesta en escena de Tcherniakov , salón-cocina-salón, no estuvo mal, incluso clasicorra, pero lo que les hicieron interpretar fue de juzgado de guardia, ¡merecido abucheo¡.

Pd. Como en el cine de San Sebastian estaba todo completo, me acerque por primera vez a los cines Niessen de Renteria, ¡ sorpresa ¡ , en el entreacto hubo una mesa alargada con canapes, tortilla de patatas etc etc, vinito y refrescos para disfrute del personal, ¡todo gratis¡....ideal para para pasar el tiempo y hacer amistades .
¡ Que cunda el ejemplo¡

Pues chico, menos mal que hay al menos un señor con voz de barítono en este repertorio. Lucic no es un cantante imaginativo, tiene defectos, pero, tal y como están las cosas, habrá que guardarlo en una urna.

Y sí que es raro que una cantante del tipo de la Damrau vacile justo en el primer acto. ¿Estaría tan preocupada por lo que sigue que no se concentraba? ¿O será que se han exagerado algunas cosas sobre la Damrau? Yo también la vi en ese recital del TR, y estuvo bien, pero tampoco la vi a un nivel muy alto en la escala Tetrazzini

De todas formas, habrá que ver cómo evoluciona la cosa. También existen malas noches. Y más en la Scala.

En el Conde Duque de Madrid daban una copa de vino para promocionar de Pago de Cirsus, en Navarra. Año 2010. No estaba pero que nada mal.
En la publicidad ponía que la calidad de los vinos de pago es muy superior a la de los vinos con DO. Aquí ya se pasaron. No se puede idear el márquetin con tantas copas encima...

Cómo disfruté con el Falstaff de anoche desde el Met. Una función redonda, de principio a fin.
Siempre he pensado que es una pena que Verdi encontrase el buen camino TAN TARDE…

Una representación magnífica, con una gran puesta en escena de Carsen, una dirección brillante de Levine y con unos cantantes perfectamente caracterizados. El Falstaff de Maestri metido en papel hasta en la entrevista del intermedio y muy buenas voces de las féminas, especialmente la de esa pedazo de Mezzo que es Stephanie Blythe.

Lo único que me defraudó un poco fue Carsen en el cuadro II del tercer acto en el parque de Windsor, donde me esperaba más poesía y una estética más deslumbrante, cuestión en la que suele destacar este director. Me pareció una solución un tanto pobre y poco imaginativa, aunque la conclusión del acto armando la cena en un segundo fue muy brillante. En general la dirección escénica fue sobresaliente y la escenografía y vestuario elegante y exquisita.

Uno sale de esta ópera con una sonrisa de oreja a oreja. Creo que Verdi en plena madurez nos hace una bella descripción de lo que es la vida y al mismo tiempo de lo que es la ópera, poniendo música de forma magistral a todo lo que sucede en la escena. Aunque se pueda disfrutar de una versión de concierto por la calidad de la música, no hay duda de que esta ópera tiene que visualizarse para que con una buena producción alcance todo su esplendor.

Lástima que todos aquellos que piensan que en la ópera solo importan las voces no hayan comprendido al propio Verdi en este tratado teórico extraordinario sobre la altura que puede alcanzar el teatro musical.