Gilda queda sola en el jardín. En un breve recitativo (
Allegro assai moderato) evoca el nombre falso del Duque. El acompañamiento, con escalas de la flauta (
dolce) sobre armonías suspendidas sólo de las maderas, es el de un estado de ensoñación (la ultima frase de Gilda está indicada
morendo) Las flautas entonan la melodía (
dolcissimo) del aria, al más puro estilo
belcantista. Este tema, con sus silencios y en
staccato, puede sugerir la respiración agitada y los latidos del corazón de Gilda. Cuando ella la retoma además añade pequeños trinos y notas picadas (^) que refuerzan esta impresión (el texto así lo sugiere también; Rodolfo Celletti la ha llamado “aria del
batticuore”) He aquí la diferencia entre Verdi y Rossini: en éste la coloratura es alegórica e idealizada, en aquél hay una imagen dramática o un estado de ánimo asociados. Aunque la escritura va haciéndose más y más elaborada, la tradición de asociar el personaje a sopranos ligeras ha trivializado muchos pasajes que serían mucho más expresivos tal como fueron escritos. En particular desde
E fin l'ultimo sospir, con sus
messe di voce, o las escalas descendentes a zonas realmente graves para una voz ligera nos dicen que “Caro nome” ha de ser el despertar amoroso de Gilda, no el "perezoso bostezo" que denunciaba el crítico Henry Chorley. La cadencia original de Verdi suele mutilarse, en particular la
messa di voce sobre el trino final.
SCENA XIII
Gilda
GILDA:
Gualtier Maldè!... nome di lui sì amato,
Scolpisciti nel core innamorato!
Caro nome che il mio cor
Festi primo palpitar,
Le delizie dell'amor
Mi dêi sempre rammentar!
Col pensiero il mio desir
A te ognora volerà,
E pur l'ultimo sospir,
Caro nome, tuo sarà.
(Entra in casa e compariscce sul terrazzo con una lucerna
per vedere ancora una volta il creduto Gualtiero,
che si suppone partito dall'altra parte)
Caro nome