Me gustó 1917.

Capitain Conan la tengo pendiente, es de Bertrand Tavernier que tiene una gran película sobre la Primera Guerra Mundial: La vie et rien d’autre (1989) que evoca a sus millones de muertos (de los cuales ya nadie se acuerda según el protagonista de Les deux anglaises et le continent de Truffaut) en la historia del coronel de un regimiento (Philippe Noiret) que tiene a su cargo identificar a los miles de combatientes sin nombre cuyos restos yacen esparcidos en el campo de batalla de Verdún. Una reconstrucción minuciosa, plantea la tensión entre recordar hechos terribles y la necesidad de seguir viviendo... para las autoridades más bien eludir sus responsablidades en la matanza.

Otra grande es La Grande Guerra (como se le llamaba antes de la Segunda) de Mario Monicelli (1959) sazonada por las actuaciones de Vittorio Gassman y Alberto Sordi que de bufones pasan a héroes.

Confieso que sólo he visto el trailer, y al ver que la acción está rodada como un videojuego, ya perdí el interés. El argumento, tal como lo explican, también tiene algo de videojuego. Gran parte del cine actual parece ser así; y yo evidentemente soy de otro tiempo, nunca aceptaré que ese tipo de lenguaje visual sea el idóneo para un largometraje. A pesar de todo puede que la vea algún día.

Y tampoco me gustó mucho Enemigo a las puertas. El lenguaje visual sí, y la producción en general. Lo que me chirría es el guión, sobre todo el tratamiento de los personajes. Seguramente el temible Zàitsev no era tal como lo pintaba la propaganda soviética de la época, pero mucho menos seria un chico bueno de Hollywood, que es lo que muestra la película.

Al parecer, el “auténtico” mejor francotirador de todos los tiempos era un hombrecillo finlandés, que liquidó a 500 sóviets en el breve tiempo que duró la Guerra de Invierno. Se merece una buena película (puede que ya la tenga) y además tenía que ser un personaje de carácter, ya que una bala que se llevó le dejo la cara bastante torcida.

Y claro que me acuerdo de La vie et ríen d’autre, lo que había olvidado es el título . Un magnífico cuadro de la posguerra, al estilo de la novela de Lemaître Au-revoir là-haut . Y Tavernier es uno de mis directores favoritos; creo que no me perdí ni un título de la retrospectiva que le hicieron en mi ciudad, cuando el Ayto aún tenía pretensiones culturales y otorgaba un premio anual a cineastas franceses. También lo recibieron Patrice Leconte, Agnès Varda, Emmanuel Carrère y el cómico Tchéky Karyo.

A mí Enemigo a las puertas me encanta. Históricamente seguro que no es muy exacta, pero como película me parece una pasada, funciona genial.
El francotirador finlandés al que se refiere será Simo "Simuna" Häyhä, "La Muerte Blanca". Poco más de metro y medio de altura y más de 500 enemigos abatidos (confirmados, parece que podrían ser bastante más). Y sin mira telescópica.

Hombre, películas sobre la Gran Guerra hay unas cuantas y bastante curiosas (cuando menos) la mayoría de ellas. Algunas (como en todo) magníficas. Desde las estupendas y precursoras ¡Armas al hombro! (Charles Chaplin, 1918) y J'accuse (Abel Gance, 1919), hasta la comentada 1917 (Sam Mendes, 2019), pasando por la primera versión de Los cuatro jinetes del Apocalipsis (Rex Ingram, 1921), El gran desfile (King Vidor, 1925), El precio de la gloria (Raoul Walsh, 1926), Alas (William A. Wellman, 1927), Cuatro hijos (John Ford, 1928), Sin novedad en el frente (Lewis Milestone, 1930), Cuatro de infantería (Georg Wilhelm Pabst, 1930), Mata Hari (George Fitzmaurice, 1931), Adiós a las armas (Frank Borzage, 1932), Remordimiento (Ernst Lubitsch, 1932), La gran ilusión (Jean Renoir, 1937), El espía negro (Michael Powell, 1939), Sargento York (Howard Hawks, 1941), La Reina de África (John Huston, 1951), Senderos de gloria (Stanley Kubrick, 1957) (una de las mejores, en mi opinión), La Escuadrilla Lafayette (William A. Wellman, 1958), La Grande Guerra (Mario Monicelli, 1959), Lawrence de Arabia (David Lean, 1962), Rey y patria (Joseph Losey, 1964), Las águilas azules (John Guillermin, 1966), Los rojos y los blancos (Miklós Jancsó, 1968), Johnny cogió su fusil (Dalton Trumbo, 1971), Gallipoli (Peter Weir, 1981), Capitán Conan (Bertrand Tavernier, 1996), El pantalón (Yves Boisset, 1997), Regeneration (Gillies MacKinnon, 1997), La trinchera (William Boyd, 1999), El batallón perdido (Russell Mulcahy, 2001), El pabellón de los oficiales (François Dupeyron, 2001), Deathwatch (M.J. Bassett , 2002), Largo domingo de noviazgo (Jean-Pierre Jeunet, 2004), Feliz Navidad (2005), El almirante (Andrey Kravchuk, 2008), Caballo de batalla (2012), etc.

Y todo ello por no hablar del cine que se hizo mientras la propia guerra estaba activa, del que también podrían mencionarse un buen puñado de títulos...

Por supuesto Senderos de gloria es una de las grandes películas de todos los tiempos, en eso estamos todos de acuerdo. Y Armas al hombro en su género no está mal, aunque no sea ni de las mejores de Chaplin. La escena en la que se toca un pie y no lo siente (es el del vecino) me impresiona mucho, pero es por una cuestión personal, no es que sea forzosamente una genialidad xD

Aventuras y desventuras de una estrella de la televisión en horas bajas (Dicaprio) y del especialista que lo dobla en las escenas de peligro (Pitt); en el trasfondo, Sharon Tate, Roman Polansky, la sombra de Charles Manson... y los "spaghetti western". Metraje de dos horas y cuarenta minutos para narrar una historia lineal con los acostumbrados momentos Tarantino, último clímax de violencia final incluido. No es de las mejores películas de su director y por eso no entiendo tanto bombo y platillo, en especial el Oscar a Pitt por hacer de sí mismo...

Brad Pitt es buen actor, y los Oscars muchas veces se dan, digan lo que digan, más por trayectoria que por la película (esta no la he visto) por la que son nominados. Tampoco entiendo que espera la gente de este tipo de premios.

Es buen actor, dependiendo de con quien lo compare. No hay duda de que es muy guapo, tiene mucho carisma en la pantalla, además de exhibir un registro que, si no es extraordinario, al menos resulta convincente (siempre y cuando no tenga alguien enfrente que lo deje en evidencia). El ejemplo más meridiano de lo que digo está en una de las escenas finales de "Troya", cuando el Príamo de Peter O´Toole le suplica al Aquiles de Pitt que le entregue el cadáver de Héctor para darle digna sepultura. La diferencia entre ambos es tan abismal que yo sentí hasta pena por el americano.

La verdad es que los Oscars hace tiempo que se dan como si fueran trofeos de tómbola... ¡Y pensar que intérpretes como Grant, Douglas, Garbo, Stanwyck, Clift, Bacall, Gardiner, Kerr, Mitchum y otros no ganaron nunca una estatuílla...!

Otro voto a favor de esta película, que en su momento vi tres veces en el cine y que compré en DVD (una de los primeras películas en este formato que adquirí). Con el tiempo me han llegado a gustar más otras pelis sobre el tema, sobre todo "Stalingrado" (Joseph Vilsmaier, 1993), otra cinta con bastante presupuesto, pero más sucia y cruda que la de Annaud. Sin embargo, mi peli favorita sobre el frente ruso sigue siendo "La cruz de hierro" (Sam Peckinpah, 1977), ambientada si no recuerdo mal en la primavera de 1943, con un atractivo toque de western y un reparto de lujo: James Coburn, Maximilian Schell, James Mason, etc.

Es que a ver, "buen actor" no significa "al nivel de Peter O'Toole" y además Troya es de lo peor que ha hecho Brad Pitt (está para matarlo). Junto con "¿Conoces a Joe Black?" lo peor que le he visto.

Propongo como punto de encuentro "Malditos bastardos".

¿Pero no hablábamos de la WWI? ¿Cómo hemos terminado en la II?

Diria que alguna de las citadas es de la II pero vamos, que se hace lo que se puede para juntarla con Brad Pitt. Demasiado "bonito" para mi gusto.

Para mi ,el acierto de" enemigo a las puertas "está en representar a los dos bandos, de la contienda, en las figuras de los dos francotiradores .
Le da un enfoque innovador a un tema trillado, como
es el de la batalla de Stalingrado, que modifico el devenir de la guerra , dando la victoria final a los soviéticos.
La elección de Jude Law, que a usted no le convence, supongo que obedecería a criterios comerciales, no en vano era el guapo oficial de Hollywood por aquellos días.
Ed Harris està sobervio, como casi siempre, al igual que Rachel Weisz ,muy en boga en aquel monento.
En definitiva, una excelente película, en mi opinión.