¿Como están yendo las corridas esas de la Feria de Bilbao, la de los toros grandes de 600 kg. como mínimo y como les gusta allí ?

Se acerca la feria del Pilar en Zaragoza, ¿alguien va a ver algún festejo? Desde el tercio de la Monumental de Barcelona, Jago

Triunfo anteayer sábado, de Morante de la Puebla en la Monumental de Barcelona, en la denominada "Corrida de la Libertad". Al no tener referencia de nuestro corresponsal particular D.Jago , copio y pego el artículo del buen crítico Paco March

"La belleza y sus milagros

http://www.lavanguardia.es/premium/epap ... 06082.html


Corrida de toros. 2. ª de la Feria de la Libertad Mercè 2010 Toros: 4 toros de Zalduendo y 2 sobreros de Parladé (2 º y 6 º bis,), terciados, nobles y flojos tirando a inválidos. Pesos: 550 kg; 530 kg; 539 kg; 555 kg; 569 kg. y 509 kg. Toreros: El Tato (saludos y oreja, aviso); Morante de la Puebla (saludos y 2 orejas, aviso). y El Fandi (saludos, aviso y silencio). Morante salió en hombros. Asistencia: Media entrada. Lugar y fecha: Plaza Monumental (25/ IX/ 2010)



PACO MARCH
Se llevaban a Morante calle Marina arriba, en procesión pagana ebria de toreo y clamando libertad, mientras la ciudad en fiestas y la Catalunya antitaurinas hacían como que no lo veían. Peor para ellos, peor para esos que "antes iban de profetas, / ahora el éxito es su meta. / mercaderes, traficantes,/ más que náusea dan tristeza,/ no rozaron ni un instante / la belleza" (Aute dixit).

Morante de la Puebla sublimó el toreo, dando la vuelta auna tarde que se presentaba convulsa y continuó torcida, con los impresentables zalduendos dando al traste con las ilusiones de público y aficionados, pese a la buena voluntad de El Tato, quien nueve años después ha vuelto a enfundarse la taleguilla y derrochó voluntad y sentido del temple, hasta cortar una oreja cariñosa tras estoquear al cuarto. También El Fandi, atlético y superficial, en su línea con las banderillas y con poco reposo con la muleta.

Salió el quinto, tan poquita cosa como sus hermanos, al picador casi ni le saludó, pero el genio de la Puebla hizo así y acabó con el cuadro. Asentado el torero, cimbreaba la cintura en la pincelada exquisita del derechazo, embarcaba el natural con caricia de terciopelo. Y el ayudado, por alto, a dos manos. Yel pase de pecho, en amalgama de hondura y arte. Y la muleta en la izquierda otra vez para el natural hondo. Suena un aviso: ¡a quién le importa! Todos, el torero el primero, queremos que aquello no acabe. Yel trincherazo, el flamear escarlata del cambio de mano. El redondo grácil y embraguetado. El natural que abarca y despide la embestida. Torea el pecho, acompaña la cintura, se hunden los riñones, se clavan los pies.

El desdén de Morante es otro desdén. Como lo es la agitanada trincherilla, el doliente trincherazo, el cambio de mano por la espalda. Y la salida de la suerte al paso. Se perfiló Morante en corto, nació la estocada del pecho, la mano izquierda que vacía la embestida, la derecha que hunde los gavilanes en la cruz y los pies deslizados, sin abandonar jamás la arena. Así se obró el milagro, así fue, que yo lo vi.

Ya lo dije yo hace tiempo: cuando Morante torea, se moja el agua. Morante es de esos diestros que nacen con ese aroma de romero, ese aroma de plaza, de brega, de sangre, de dolor y de sacrificio. De las buenas maneras, de hacer las cosas aseadas y abrir ese tarro de las esencias, de miel y romero (como el Faraón de Camas, como el Rubio de San Bernardo, como aquellos toreros que han hecho de la fiesta un arte único), mueve el capote con una exquisita conjunción entre él y el morlaco, su capote es antiguo como antaño moviendo los brazos como pocos. Tiene arte para aburrir, clava las zapatillas en el albero, no las mueve ni por asomo. Torea como se tiene que torear. El sábado en la Monumental armó un alboroto, el delirio, estoqueó a su segundo con un volapié hasta los gavilanes, nos dio un recital de arte, naturales, trincherazos, derechazos, cambiados y esos ayudados por alto que el que escribe no los sabe explicar. Barcelona se rindió al diestro, se rindió al arte, pero no se rinde ante aquellos que quieren destruir una tradición. Seguimos y seguiremos en la lucha, Cataluña es taurina desde siempre, desde Olot, VIVA LA FIESTA NACIONAL!!!! Desde el tercio de la Monumental de Barcelona, un fuerte abrazo, Jago

¡A seguir luchando!

Al final, la razón y el sentido común tendrán que triunfar.

Eso si existiese el sentido común, pero yo creo que ni existe ni se le espera, Saludos desde el tercio de la Monumental de Barcelona, Jago

¡Qué bien escribe usted, maestro! ¡Y qué grande es Morante! Cuando Morante torea, se moja el agua ... ¡ole, ole y ole!

Lo de Morante es muy serio, torero de cuajo, en los andares ya denota ese carisma y ese arte que muchos anhelan y pocos atesoran. Hace lustros que lo digo: para ver a un torero hay que verle en los andares, como Curro, el Faraón de Camas. El paseíllo, el andar, caminar hacia el destino. No vale la comparación, Curro tiene rango divino y Morante se lo está ganando. Muchas veces me dicen que Curro esto que Curro lo otro, ni caso; Curro es el arte en su sublime expresión y Morante es alumno aventajado. Independientemente de la faena que realizó el sábado en Barcelona a Morante le he visto tardes de gloria, de aroma, de arte. Capote sevillano, abierto, ancho dándole a la muerte belleza, hacen las cosas como nos gustan: a cuarta de muerte, donde el toro mata, pero allí está el embrujo y el arte en su máxima expresión. La muleta seria, de frente dando barriga y cargando la suerte, o sea, bajando la mano. El gesto sobrio, plástico. Morante tiene lo que tienen los toreros de Sevilla, como Emilio Muñoz, como Paco Camino, como el Rubio de San Bernardo, Don Pepe Luís Vázquez. Triana te embruja y el Guadalquivir asiente, así son los pases de estos toreros, como el rio, lentos, largos e infinitos. Se para el tiempo, el mundo: ¡Señores! Silencio que Morante, que Curro hoy torean. Desde el tercio de la Monumental de Barcelona, un fuerte abrazo, Jago

DON Jago, me quito el sombrero ante la belleza de los escritos.

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+otro ( y eso que es "español " de adopción! )

Las narraciones de las corridas por YAGO son un poema taurino. Felicitaciones maestro por tus enseñanzas del arte del toreo
Es un placer leer tus mensajes

Muchísimas gracias por vuestras palabras. Me encanta hablar y escribir sobre la Fiesta Nacional porqué es una pasión que tengo hace ya unos cuantos lustros. Pequeñito era yo (aunque los que me conocen saben que nunca he sido pequeñito, de tamaño claro) y ya me tragaba todos los festejos que televisaban. Empecé a ir a los toros siendo un chavalín y en la primera corrida que asistí solo, vi como un toro le arrancó la vida a Joaquín Camino, delante del tendido 10 de la Monumental barcelonesa, “Curioso” era el morlaco de la dehesa de Don Atanasio Fernández que le propinó dos tabacos mortales al embroque de un par de garapullos. Me considero una persona afortunada ya que las cosas que me gustan las amo y las vivo con pasión. Los toros, la ópera, la caza son aficiones aunque una de ellas es mi profesión. Como decía el "Faraón" de la ópera, Giuseppe Di Stefano "se uno non interpreta e non canta con passione a cosa c... canta?" (Si uno no interpreta y no canta con pasión ¿para que c... canta?) Y en los toros lo mismo. Asistir a un festejo taurino es una experiencia única y cada vez diferente. El aroma que se siente en una plaza es inexplicable. Los toros, la Fiesta Nacional, es un espectáculo inmenso porqué está cimentado en pequeños y grandes detalles, la liturgia taurina, el léxico....desde el monosabio, pasando por el picador, al torero y acabando en el rey de la fiesta que es el toro todo está perfectamente orquestado, no tiene fisuras y si algo no se hace como está mandado, allí está el respetable que demuestra su disconformidad. Los toros hay que vivirlos, como la vida pero sobre todo con amor y pasión, así lo siento y así os lo cuento. Desde el Tercio de la Monumental de Barcelona, un fuerte abrazo, Jago

Yo iré el lunes.
ya pondré cr´tica y estos días colgaré enlaces.

Mi aversión por los toros (que no es estúpidamente prohibicionista, por otro lado) casi me lleva a perderme los escritos de Jago.