Hacía tiempo que no me enganchaba tanto con una serie. Eso sí, el último capítulo es un pelín atropellado.
Imprescindible.

Seguimos en las inmensas soledades septentrionales (esta vez en las de Islandia) con el thriller Atrapados. Ni siquiera el tono moroso y calmo que los nórdicos suelen imprimir a sus series es un obstáculo para conseguir que se mantenga el suspense y el interés del espectador. Promete, pero ya veremos...

Abandono las desapacibles latitudes nórdicas para sumergirme en la no menos desapacible comunidad rural de Crockett Island, que es donde se desarrolla la acción de Misa de medianoche, la hiperpromocionada y superdifundida serie de Netflix que está siendo todo un fenómeno mediático. Pues bien, no puedo estar más en desacuerdo con dicha opinión pues, en el fondo, nos hallamos ante la enésima reinterpretación del mito del vampiro, pero en pseudofilosófico... Bueno, ojalá se hubiera limitado a ser una sencilla historia de vampiros. Pero no, estamos ante un guión pretencioso, dicho por personajes verborrágicos con los que resulta imposible empatizar (pues carecen del menor interés humano y dramático), que sueltan parrafadas inacabables y pretenciosas sobre temas supuestamente trascendentales. Y con un final que parece sacado de una mala película sobre los Padres Peregrinos...
Un ejemplo paradigmático más del "nuevo" terror intelectualoide y trascendente tan en boga ahora, dirigido a paladares exquisitos y mentes privilegiadas. No apto para espíritus superficiales, zafios y vulgarotes, que disfrutamos con películas que no necesitan manual de instrucciones para ser entendidas.
En fin, un auténtico bodrio. Es mi humilde opinión, claro.
¿Lo único bueno? Que es una miniserie...

¡Qué diferencia, sin embargo, cuando hablamos de El juego del calamar. En un solo instante de esta serie surcoreana --que está despertando verdadero furor-- hay más verdad, intensidad, conocimiento del ser humano, profundidad psicológica, desarrollo de personajes, trascendencia, grandeza moral, lirismo, humanidad, suspense y tensión que en toda la retorica huera y pedantesca que el gurú Mike Flanagan nos mete en su catequética (y tan loada) "Misa de medianoche"...

¡Qué maravilla de serie la que ha construido Hwang Dong-hyuk! Lástima que, al final, se haya dejado tentar por los cantos de sirena, planteando unos minutos finales que, por desgracia, rebajan la enorme intensidad previa de toda la trama y dejan la puerta abierta a una posible continuidad que no parece lo más aconsejable...

Si no fuera por eso, y salvo algunos detalles menores de lógica argumental (que, sin embargo, no lastran el resultado final), estaríamos ante la perfección supina...

Fabulosa "El juego del calamar". Coincido totalmente con sus apreciaciones y le agradezco las de Misa de Medianoche, porque así me la ahorro. Ya estoy hartito de bordios pretenciosos, intelectualoides y, en el fondo, vacíos y aburridísimos.

Ayer oí hablar de la serie y ya sé hasta quien gana... O no sé si realmente, ha vencido de verdad.

Ana Tramel: El juego. De RTVE, hay que apreciar el producto oficial, jeje. Maribel Verdú es una de mis actrices clásicas favoritas, aunque por supuesto en su larga carrera haya hecho muchos bodrios (¿y quién no?), la serie se deja ver, tiene el típico ritmo acelerado para contener el aburrimiento, su dosis de violencia y nada de sexo. Lo mejor: la carga militante contra los juegos de azar, de alto voltaje xD; al menos a mí me gusta que los que se dedican al producto audiovisal expongan sus ideas sin ambajes, valientemente.

Muy, muy estimables los dos primeros capítulos del nuevo trabajo de Alejandro Amenábar. Me refiero, claro está, a la serie "La Fortuna", basada en novela gráfica "El tesoro del Cisne Negro", de Paco Roca. El realizador español se ha enfrentado, por vez primera, a este formato y ha logrado salir (en mi opinión) bastante airoso del empeño. Partiendo de una trama que tampoco es como para lanzar cohetes --aunque el talento narrativo de Roca siempre está ahí--, Roca/Amenábar consiguen crear (cada uno desde sus respectivos medios expresivos) una historia que tampoco pasará a los anales de la genialidad, pero que ofrece al espectador buenos momentos de entretenimento. ¿Y acaso hace falta más?

La puesta en escena de la serie resulta excelente, las interpretaciones son buenas y, además, se entiende perfectamente a los actores (estupenda la Lucía de Ana Polvorosa y el ministro de Karra Elejalde; estimable el Álex Ventura de Álvaro Mel y muy bien todos los secundarios); hay buen pulso narrativo, que no decae en ningún momento; las escenas históricas --traídas a base de analepsis-- que recrean los últimos momentos del navío que da título a la serie no llegan a ser perfectas, pero sí resultan muy creíbles y están relativamente cuidadas. Además, los efectos visuales tampoco chirrian y contribuyen a hacer más creíble la acción.

Hasta el momento Movistar+ sólo ha ofrecido dos capítulos --de los seis que, al parecer, tendrá la serie--, pero debo confesar que me quedé con ganas de seguir viendo más y saber lo que le ocurría a los protagonistas.

¡Enhorabuena a Paco Roca, a Amenábar, a los actores participantes y, por supuesto, a Movistar +

Ciertamente. Voy a buscarla.

En Netflix, "Die Wahrheit Uber Franco" o "La dura verdad sobre Franco", cinco capítulos en alemán con subtítulos en castellano. La serie, no sé por qué razón (...) no ha sido publicitada ni doblada por la cadena, e incorpora material fílmico y gráfico de interés, bien aderezado por comentarios de historiadores británicos y españoles, así como por el testimonio de protagonistas de la época.

El caso Hartung, danesa, el título original significa “El muñeco de castañas” o algo así.
Por algún sitio lei que el argumento era “original”… Ja, la originalidad es más de lo mismo, lo de siempre, otra vuelta de tuerca a la burbuja del género criminal nórdico. Se deja ver, los paisajes son otoñales, pero tampoco se recrea mucho en ellos.

Yo la acabé ayer. Me gustó mucho, no me parece que tenga mucho sentido una segunda temporada (que la habrá), pero bueno... supongo que pueden hacer algo interesante, todo depende de por donde lo lleven, además es muy de cómic (perdóname la palabra), algo así se podía imaginar.

Vistos ya los 6 capítulos. Serie bien realizada y con interes

Intensa y cruda mini serie de 10 capítulos que narra las vicisitudes de una joven madre soltera, sometida al maltrato piscológico de su alcohólico y violento compañero, y las enormes dificultades que debe afrontar para conseguir independizarse a duras penas limpiando casas. Muy bien ambientada e interpretada por Margaret Qualley y su madre en la vida real, Andie MacDowell, alejada de sus papeles habituales, junto a un reparto coral y eficaz.

Muy sorprendido (al menos en el primer capítulo de los cuatro de la mini serie) por este documental que yo presagiaba hagiográfico pero que resulta crudo y contundente sobre los primeros años de la Flores y los testimonios -particularmente, los de ella misma- que reflejan el arduo recorrido de esta, personal y profesionalmente, desde "vender su honra" por 50.000 pesetas (de aquellas) y sus numerosos abortos, a terminar huyendo de una tormentosa relación con Manolo Caracol.