Hoy voy a escuchar la obra en radio Clásica alas 20 h. Espero q me guste.
Para Simon Bocanegra : que sintonice www.Rne.es o que vaya por www.Classicalwebcast.com.
Saludos.

GRACIAS, PING !!!!!!!!!!!!!
escucharemos !

alguien puede informar DE QUÉ LA VA, LA OBRA ?!?!?!??!


beshos

simon

Me explico, Mariola Cantarero está anunciada tanto en el Teatro Real para cantar su aria en Idelgonda y también en el Teatro de la Zarzuela como Doña Francisquita, el mismo día y a la misma hora. ¿Cómo es eso?, ¿la sustituirán en el Real?, supongo que nos lo dirán en la retrasmisión, por cierto el día 23 retrasmiten su Doña Francisquita también en Radio 2,

Un reparto español de lujo, en el que destacan el barítono Carlos Alvarez, las sopranos Ana María Sánchez y Mariola Cantarero y el tenor José Bros, participará el jueves y el sábado en el Teatro Real en el rescate de la ópera de Emilio Arrieta 'Ildegonda'. Se trata de la primera ópera española que pisó el escenario del Teatro Real y forma parte del el ambicioso proyecto de la dirección del coliseo de recuperar, temporada tras temporada, el patrimonio musical español perdido u olvidado.

Estrenada el 26 de abril de 1854, 'Ildegonda', un "melodrama serio" en dos actos, con libreto de Temistocle Solera, el mismo libretista que utilizó Verdi para su 'Nabucco', fue la primera ópera española que pisó el escenario del Teatro Real, en aquellos tiempos dominado por el repertorio italiano.

El rescate de 'Ildegonda', en versión de concierto, título con el que el Real echará el telón de su séptima temporada lírica, se inscribe en el ambicioso proyecto de la actual dirección del coliseo de recuperar, temporada tras temporada, el patrimonio musical español perdido u olvidado.

"Para el Teatro y para la vida musical de este país, la recuperación de una obra olvidada supone un importante paso adelante. Es el principio de un ambicioso proyecto", dijo Jesús López Cobos, director musical del Real y director en los dos conciertos, al frente de la Orquesta y Coro de la Sinfónica de Madrid.

En un encuentro con la prensa, López Cobos recordó que 'Ildegonda' fue el primer resultado de la estancia de Arrieta (1821-1894) en Milán, a donde viajó para estudiar música. A su regreso a España, logró que su ópera se escuchara en el teatro del Palacio Real, en presencia de la Reina Isabel II, que le nombró maestro de capilla. Desde allí, saltó al Teatro Real.

"Después de su estreno -recordaba López Cobos- cayó en el más absoluto de los olvidos, como tantas otras, algo incomprensible, pues se trata de una ópera de magnífica factura. Es música italiana, no española, que era lo que gustaba entonces".

Arrieta escribió 'Ildegonda' en pleno auge de la ópera de Verdi, Donizetti o Rossini, y para Emilio Sagi, director artístico del Teatro Real, es "una obra mucho mejor" que muchas de las óperas de los tres maestros italianos."Al ver la partitura, enseguida entendí que valía la pena, sobre todo con un reparto como el que hemos logrado reunir. Para su época, la orquestación de Arrieta es de gran originalidad", apuntó López Cobos.

El maestro justificó el hecho de que 'Ildegonda' se haga en concierto y no representada por la complejidad del argumento, que no lo facilita, aunque se trate de la clásica historia de una joven enamorada a quien la familia quiere casar con otro hombre.

Nunca antes, todos los cantantes que coincidirán en 'Ildegonda' habían coincidido juntos sobre un mismo escenario.

"Nos sentimos muy orgullosos de que todo el reparto sea español, porque podía haber sido de otra manera, al tratarse de una ópera italiana, pero es de alabar la sensibilidad del Teatro para uno de sus retos culturales más arriesgados", dijo el barítono malagueño Carlos Alvarez, en estos momentos una de las voces españolas de más brillante carrera internacional. "Trabajar en estas condiciones, las mejores, es un privilegio, y me hace sentir orgulloso de este Teatro", recalcó.

A la alicantina Ana María Sánchez afrontar este reto profesional -el suyo, Ildegonda, es un papel largo, "no acaba nunca", que le obliga a estar en escena en todo momento- le satisface especialmente. "La obra -dice- va a ser una auténtica sorpresa. nadie se imaginaba que Arrieta pudiera escribir así. En ningún momento decae la tensión, la música".

José Bros, cuando recibió por vez primera la partitura, pensó que se trataba de una ópera de Donizetti, compositor que él conoce muy bien. "Es una música que me resulta familiar, por mi tipo de repertorio, por tesitura, y por los momentos mágicos que te facilita. Siento una gran emoción".

Para la más benjamina del reparto, la soprano granadina Mariola Cantarero, su personaje, Idelbene, aunque corto es "una joyita. Estar rodeada de toda esta gente, de tan magníficos cantantes, me hace sentir un poco pequeña", confesó.

Angel Rodríguez y Stefano Palatchi, en los papeles de Ermenegildo Falsabiglia y Roggiero Gualderano -todos los nombres de los personajes sorprenden por su rareza- completan el reparto. "Todos aceptaron estar en este proyecto prácticamente a ciegas, en un momento en el que todavía no estaban editadas todas las partituras", apuntó López Cobos.

La edición ha sido realizada por el Instituto Complutense de Ciencias Musicales, que ha tardado un año y medio en completar el trabajo.

fffffffaaaaaaaaaaa.......
Ildegonda, Idelbene, Ermenegildo Falsabiglia, Roggiero Gualderano..... el libretista de Nabuccodonosor OBVIAMENTE se superó a sí mismo !!!!! jaajajaajajajaajjajaajjaaj

escucharemos, aunque sea un rato, entonces

beshos

simon

Cuatro y poco mas de la madrugada del domingo y acabo de escuchar el primer acto de Ildegonda. Una opera escrita con mucho oficio pero con poca inventiva: una sucesion de lugares comunes que reflejan al Donizetti promedio. Que diferencia con Merlin (para mencionar otra opera redescubierta), que si tiene mucha inventiva melodica. Nada que ver con Verdi, claro. Lo mejor el duo de Bros y Sanchez. No creo que escuche el segundo acto

Hay un triple reparto y hoy la soprano en Doña Francisquita es Carmen González.

Pues yo la acabo de escuchar entera... Bueno, más bien la he tenido de fondo mientras estudiaba, pero lo cierto es que casi le he prestado más atención a la música que a los apuntes
Me ha parecido muy bonita... Y los cantantes muy bien, de verdad.

Sieglinde

No he podido acudir a las funciones de Ildegonda porque tenía otros compromisos pero sí al ensayo general que se celebró el martes; todos me gustaron aunque al hilo de lo que decís en el intermedio parte del "respetable" comentó que Ana María no se encontraba en buena forma; creo que se referían al final de su primera aria que quedó algo destemplado. Aunque quizás no rindió como nos tiene acostumbrados a mí me pareció que resolvió bastante bien su papel así como todos sus compañeros; Cantarero hasta supo sacarle algo a esa música!!!

Ayer asistí en el Real a la audición de Ildegonda en versión concierto,La interpretación musical fué magnífica y el público,algo mermado,por ser una ópera tan poco conocida cumplió con creces a la hora de aplaudir y premiar a los intérpretes que estuvieron extraordinarios.Ana Mª Sanches y Cantarero magníficas,Bros y Alvarez muy muy bien y también Palatchi,Lopez Cobos como siempre un gran director.-Ahora bien de resucitar música española nada.Fué la ópera que Arrieta presentó en Milán algo así como la tésis para conseguir el título de compositor,y rindió pleitesía a los gustos de la época y a los compositores que fueron sus maestros en Milan .-Vacca discípulo a su vez de Paisiello,y por eso la música de muy buena factura recuerda a Donizetti,pero es como una falsilla de ópera italiana belcantista,nada que ver con Marina,quizás por ser ésta más popular.
Las versiones en concierto no són teatro lírico,falta la acción y el embrujo de lo que es la ópera. Ultimamente tanto en el Liceo como en el Real se están acogiendo a éste tipo de representaciones y es una lástima porque a mi juicio se pierde mucho.

Hombre, luigi, ¿no te parece que exageras un pelín? Del Liceo no puedo opinar, porque no estoy tan al tanto (creo que sí que es cierto que llevan a cabo bastantes más versiones-concierto... pero de una calidad increíble: ahí está el caso de la Maria Stuarda de esta temporada), pero... ¿El Real? ¿Funciones en concierto en el Real? La temporada pasada, si no me falla la memoria, no se ofreció NINGUNA y este año sólo la Ildegonda... En la temporada que viene me parece que sólo está anunciada en versión concierto Cleopatre de Massenet. Vaya, que tampoco es como para tirarse de los pelos, jajajaja.

De todos modos, me parece interesante una oferta en versión concierto... reduce costes, permite traer óperas menos conocidas e incluir así, de paso, más títulos en la temporada
¡Evidentemente, eso no implica que se vaya a prescindir de la ópera escenificada!

Muchos besos,

Sieglinde

bueno...... eso de "opera en versión de concierto" es medio un enjendro.. digo, si es versión de concierto, no es ópera....... falta la mitad del lenguaje........... (o el 49 % del lenguaje)......... igual, es lógico para óperas o tan complejas en su estructura que son prácticamente irrepresentables, u óperas que por su relación costo-atractivo, no vale la pena............

beshos

simon

Aquí os dejo la crítica aparecida hoy martes en Mundoclasico.com:

Esto sí es un éxito, querida Ildegonda
Madrid, 17.06.2004. Teatro Real. 'Ildegonda', melodramma serio en dos actos de Emilio Arrieta sobre libreto de Temistocle Solera (Madrid: Teatro Real, 10.10.1849), edición crítica de María Encina Cortizo y Ramón Sobrino. Elenco: Carlos Álvarez (Rolando Gualderano), Ana María Sánchez (Ildegonda), José Bros (Rizzardo Mazzafiore), Ángel Rodríguez (Ermenegildo Falsabiglia), Stefano Palatchi (Roggiero Gualderano) y Mariola Cantarero (Idelbene). Coro (director, Martin Merry) y Orquesta Titular del Teatro Real. Jesús López Cobos, director.

Xoán M. Carreira
Los rumores sobre el entusiasmo que Ildegonda había despertado en López-Cobos y Carlos Álvarez contribuyeron a crear una expectación inusual ante el estreno de una ópera española en el Real. No es poco si tenemos en cuenta que hablamos de un público escaldado tras haber sufrido el sopor inducido por Margarita la Tornera y Los amantes de Teruel, y las desagradables experiencias de La señorita Cristina y Don Quijote. Cuando las cicatrices del público duran más que la efímera vida de una obra musical, es imprescindible revisar los criterios de programación. Algo que entendió perfectamente la StaatsOper de Berlín al rechazar el Don Quijote de Cristóbal Halffter por más que se le ofreciese en unas condiciones económicas más que ventajosas: no basta con que la producción salga barata o regalada incluso, el teatro tiene que estar lleno, porque un público escaldado no siempre es recuperable. ¿Imaginan un museo de primera categoría que aceptase colgar cuadros sólo porque le salieran gratis o insistieran sus patrocinadores?. Pues un teatro es peor, porque un museo también es un recipiente de obras, pero un teatro sólo existe cuando tiene público.

No es el caso de Ildegonda, donde el único error de los programadores del Real fue hacer sólo dos representaciones. Pocas veces había visto al público del teatro disfrutar tan espontáneamente como lo hizo en le estreno de Ildegonda. Esto sí es un éxito, ratificado luego por la crítica madrileña que no escatimó elogios hacia la partitura y no perdió ocasión de maltratar el libreto sin dar el menor argumento. No caeré en la desmesura de un apreciado colega que en el entreacto me dijo entusiasmado: "¡Esto es mejor que Bellini!".

Mejor que Bellini, en su género, no hay nada. Bellini y Chopin fueron únicos e irrepetibles, y nada es comparable con su deslumbrante fulgor. Pero hasta el más mezquino reconocería que Arrieta mereció el premio fin de carrera de composición y que es admirable que un joven compositor exhiba en su primera ópera esa capacidad para absorber tal cantidad de cosas recientes, mezclarlas con fortuna y apropiárselas mostrando una personalidad propia. Ildegonda me recuerda el caso de la Sinfonía de Bizet, que también fue un ejercicio fin de carrera planteado como un puzzle -en Bizet cada movimiento sigue el estilo de un miembro del tribunal examinador- y cuyo resultado es una composición coherente, sólida, personal y, sobre todo, hermosa. Lo maravilloso de Ildegonda es que mezcla Donizetti, Mercadante y Meyerbeer con la espontaneidad y falta de respeto que sólo un joven de 24 años puede tener y el resultado nos "recuerda" a lo que Verdi y Wagner estaban pergeñando en sus escritorios en aquellos momentos.

No puede sorprender que los intérpretes estuviesen encantados. Se podían mover en esa música como peces en el agua -¡es parte del canon!- y además es preciosa y está bien escrita. Tanto que uno -poco dado a aprobar la corrupción política- incluso le perdona a Arrieta la forma en que consiguió estrenarla en el Teatro de Palacio y 'colarla' luego en el Teatro Real.

Ana María Sánchez, siempre irreprochable, lo dio todo y "creó" el personaje de 'Ildegonda', una heroína con todos los ingredientes del primer Romanticismo. Y lo hizo sin necesidad de convertir a 'Ildegonda' en 'Elisabeth' en la escena segunda, con coro, del acto II, o en 'Violeta', en la escena última de su delirio y muerte; a pesar de las obvias similitudes entre las situaciones y resoluciones de una y otras.

No pude escuchar bien a Carlos Álvarez desde mi butaca, quedaba tapado por López-Cobos y los micros que grabaron la función. Mi impresión, un tanto subjetiva, es que efectivamente está encantado con el papel de 'Rolando' y que lo ha estudiado y reflexionado con todo detenimiento. Los elogios unánimes a su interpretación ratifican esta impresión y espero impaciente la publicación del disco para disfrutarlo.

José Bros es uno de esos cantantes que se ponen de puntillas para dar las notas agudas. Cuando canta, su garganta está tan tensa como su espalda y los sonidos tan crispados como sus hombros. En estas condiciones no se puede hacer bel canto, no hay colocación, la emisión es deficiente, la articulación crispada y el sonido sucio. Sinceramente no entiendo la admiración que dicen profesarle algunos críticos madrileños.

Estupendos los comprimarios. La tradicional solidez de Stefano Palatchi y las grandes virtudes vocales de Mariola Cantarero se crecen en papeles como los de 'Roggiero' e 'Idelbene'. Pero sobre todo fue un placer escuchar el 'Ermenegildo' de Ángel Rodríguez.

Formidable López-Cobos. Dirigió Ildegonda con una flexibilidad, finura y sentido direccional admirables. El pulso y el impulso firmes y decididos consiguieron que la Orquesta Titular del Teatro hiciera su papel, que en este caso es acompañar el canto. Como actuaba de concertino Ara Malikián, los arcos tocaban realmente juntos y casi ningún músico se apoyaba indolentemente en el respaldo de la silla. Como siempre algunos atriles desafinaron, pero las entradas fueron siempre seguras, las frases claras y las articulaciones precisas. Como siempre los metales sonaron ásperos y desagradables, pero reconozco satisfecho que la Orquesta está mejorando a ojos vista. El coro entre horrible y espantoso, como de costumbre: ni afina, ni mide, ni frasea, ni articula, pero siempre está dispuesto a machacar a un solista.

Es una pena que el Teatro Real no se hubiera decidido por una producción escénica de Ildegonda. Es de esperar que cuando se conozca la grabación la ópera se programe en otras localidades y que a medio plazo se plantee una reposición escénica en el propio Teatro Real. En cualquier caso se podían haber planteado la posibilidad de una versión de concierto con el respaldo de escenógrafo, tal como hacen algunos grupos de música antigua (y la idea se va extendiendo). No es oneroso y con poco esfuerzo se hubiese potenciado el mágico resultado de la música de Arrieta.

La anécdota de la noche estuvo en el oboísta atascado en el tráfico madrileño de última hora de la tarde. El titular se puso repentinamente enfermo y su suplente estaba "entre Pinto y Valdemoro" metido en un taxi. López-Cobos nos pidió paciencia y la tuvimos. Pero finalmente hubo que empezar sin él, repitiéndose en pequeño formato aquello de Lorin Maazel en el Festival de Santander, con los músicos de refuerzo entrando a la carrera ya iniciado el Don Juan de Strauss (Maazel, más 'impaciente' aun que otras veces, se olvidó del necesario descansito entre obra y obra). Nuestro oboísta fue más silencioso que aquellos bávaros y muchos ni llegaron a percibir su entrada. Gracias a él y mis mejores deseos para su compañero enfermo. El éxito de la función hizo olvidar la ansiedad de la primera media hora y es que salir del Real con una sonrisa en la boca es una experiencia estupenda.



29.06.2004

Hombre, mira que ponerse asi con Bros!!

"José Bros es uno de esos cantantes que se ponen de puntillas para dar las notas agudas. Cuando canta, su garganta está tan tensa como su espalda y los sonidos tan crispados como sus hombros. En estas condiciones no se puede hacer bel canto, no hay colocación, la emisión es deficiente, la articulación crispada y el sonido sucio. Sinceramente no entiendo la admiración que dicen profesarle algunos críticos madrileños."

Articulacion crispada en uno de los pocos cantantes a los que se les entiende todo? Sonido sucio? No hay colocacion?
Este critico es un mamarracho y un salvaje.
Sin mas comentarios,

PV

Vuelve la Brosfobia, la cagamos...

Cada año que pasa, Bros va a más, afianza los agudos, que ya suelta llenos y resonantes, y este caballero no se le ocurre otra cosa para decir que se pone de puntillas... Lo que no entiendo yo es la tirria que parecen tenerle algunos críticos. Anotamos en la lista negra a Xoán M.Carreira.