Hola amici,
No me acuerdo si el jefe dijo que se podían poner artículos o todo lo contrario (ya me dirá
); de momento os pego el artículo que se publicó ayer en la contraportada de La Vanguardia :
CECILIA BARTOLI, CANTANTE LÍRICA
"No saber dar es una desgracia"
Tengo 40 años. Nací y vivo en Roma. Vivo con mi compañero y desafortunadamente no tengo hijos porque no han llegado, todavía. A los 8 años me subí a un escenario. Mi creencia política es: libertad, igualdad y fraternidad. Procuro ser una buena cristiana y creo mucho en la energía de la naturaleza, todo lo que tenemos nos lo da ella
IMA SANCHÍS - 18/04/2006
- ¿Qué le llena el corazón?
- Apreciar lo que tengo, lo que la vida me da.
- Eso resulta muy difícil.
- Sí, tan sencillo y lo que cuesta. Y también me llena el corazón amar a las personas que en teoría amo, y amarlas cuando todavía están vivas.
- ¿Saber cuidar es un don?
- Naces con tu carácter, pero es vital escuchar a los otros y tener la flexibilidad para aprender siempre, la formación para ampliar sensibilidades debe ser continua.
- ¿Qué rasgo la definía de niña?
- Yo nací en un bellísimo barrio en una de las siete colinas. Mis recuerdos son la libertad de tener un enorme parque frente a mi casa y acudir a ver la magia del teatro ya con cinco años. Árboles y música me configuran.
- Sus padres eran cantantes líricos.
- Mi madre subía a escena llevándome en su vientre. La profesión ligada al canto no se hace siempre por pasión, pero en el caso de mis padres la había.
- ¿Ese ha sido el mayor legado de su maestra-madre, la pasión?
- Me enseñó la técnica del canto... Era una mujer muy fuerte..., pero, ¿qué me ha dado más allá de una magnífica educación?... Sí, el gusto por vivir y hacer las cosas con pasión, "La vida puede ser muy breve, así que lo que hagas hazlo con pasión", ese es su legado.
- ¿Y su padre?
- Siempre se ha mantenido un poco distante, no ha influido tanto como mi madre en mi carrera. Se divorciaron muy pronto, cuando yo tenía 19 años.
- ¿Sufrió por ello?
- Al contrario, su divorcio fue una liberación. Yo aconsejo vivamente a las parejas que piensan que deben permanecer juntos por sus hijos que se separen, los niños sufren mucho más cuando los padres se pelean.
- ¿Cómo le han influido en sus relaciones de pareja esas peleas en el seno familiar?
- Positivamente, porque hoy tengo clarísimo que el amor es por encima de todo respeto el uno por el otro.
- Para salir a escena, ¿qué es más importante, acumular sentimientos o ser muy puro?
- Lo importante es el compositor, hace falta estudiar su música y servirle, y esto debe hacerse con un ánimo puro y humilde.
- ¿Qué es lo peor de esta profesión?
- Que te tiene lejos de los afectos.
- Usted viaja continuamente. ¿Además de cansada es una vida desequilibrante?
- Sí, lo es, por eso es tan importante organizarla muy bien, dividir tu vida en periodos de trabajo, de descanso y de estudio. Hay que equilibrar, porque si no puede ser peligroso, y eso sólo se aprende con la experiencia.
- ¿Cuál es la compensación?
- La música es algo muy profundo, vale la pena vivirla hasta el fondo.
- A un escritor los años le enriquecen, ¿qué ocurre con un cantante lírico?
- La voz tiene un proceso biológico, crece, madura y decae. Pero tras años de carrera, aunque el instrumento, la voz, ya no es tan fresco, el crecimiento interior te puede haber convertido en un gran artista y entonces lo que haces es recitar cantando. ¿Qué es mejor escuchar una bella voz o a un gran artista?
- ¿Usted qué busca?
- En mi búsqueda hay colores, claroscuros, sombras, acentos. Un cantante es un pintor, con la voz debe conseguir crear situaciones y emociones, es una búsqueda continua marcada por dos actitudes: apertura y curiosidad.
- ¿La curiosidad la ha llevado a los castrati?
- Nadie sabe cómo sonaba su canto, pero se conoce la música que escribían para ellos y era una música con increíbles dificultades, puro virtuosismo y pirotecnia. Pero está el otro lado, la tortura a la que sometían a aquellos niños de ocho o nueve años a los que mutilaban antes de que cambiaran la voz. De todos los que castraban sólo los que tenían suerte desarrollaban una voz increíble.
- El mundo del barroco.
- Sí, en el que se buscaba la maravilla en todas las artes. Me interesa en especial ese preciso momento en el que el Vaticano prohibió el teatro lírico porque lo consideraba un antro de inmorales y de perdición, pero en realidad lo que sucedía era que no tenían el control.
- Inocencio IX prohibió a las mujeres subir al escenario.
-... Y cantar. Los castrati eran la voz femenina en los libretos de música sacra.
- ¿Era una voz femenina o era otra cosa?
- Es un misterio, sólo existe una grabación de 1902 del que dicen fue el último castrati, Alessandro Moreschi, que cantaba en el coro Sixtino. Es algo así como una voz femenina con la potencia de un hombre.
- ¿Dónde está la magia?
- La música del barroco está llena de sensualidad, virtuosismo, ritmo y contrastes.
- Si pudiera poner unos grandes altavoces en Iraq, en Afganistán, Guantánamo... ¿Qué música escogería?
- Sé que si cada uno de nosotros le dedicásemos un minuto a hacer sonar un instrumento sería un paso hacía la paz; si consiguiéramos respirar un segundo todos juntos...
- ¿Tan importante es la música en la vida?
- Es un lenguaje que va más allá de la palabra, llega directamente al alma. La música te ayuda a entender al otro sin necesidad de hablar con él, te sensibiliza. Creo que la persona que escucha música es más sensible que la que no la escucha, que la que sólo la oye.
- ¿Usted qué ha aprendido?
- Que hay que proteger y sostener el amor que sientes por los que amas. Al final eso creo que es lo más importante, más incluso que la salud.