No le encuentro sentido a muchas de las modificaciones
porque no embellecen ni mejoran sino que solo sirven para que el cantante se luzca (no estoy en contra de eso, pero más importante que la satisfacción del ego del cantante es la obra que el interpreta). Tampoco le encuentro sentido
cuando forzadamente terminan un aria con un agudo que simplemente no va de acuerdo con lo que se está expresando. Esas acrobacias son relativamente admirables pero no siempre estéticas.
Mi humilde opinión es que se debe seguir la partitura... pues si cada uno lo canta a su estilo al "pobre" compositor lo dejamos de lado. A pesar que pienso esto me parece válido que el cantante como artista que es, sea libre de hacer cambios que ayuden a transmitir a quienes lo escuchen algo especial... una emoción...
el límite? en que momento el cantante no debe hacer más cambios? ni idea!
Marina