Rubini escribió:
Abdallo escribió:
El principal problema que me plantea Domingo, más que sus excelencias y virtudes artísticas, es la de su incansable voracidad para todo. Parece que sufriera de un síndrome de ambición sin límites que lo propulsara a conseguir todos los logros imaginables en todos los campos posibles y a toda costa; es, salvando las distancias, como Karajan, al que apodaban "Dios" no sin razón. En este caso, esa actitud resulta incompatible para los que tenemos una idea de lo que un verdadero artista debe ser. Claro que, opiniones, hay para todos los gustos.
No hay que olvidar, de igual manera a "los culpables" de recoger el guante y poner oídos a las ambiciones completistas de don Plácido.
Si ninguno de ellos le hubiese puesto atención otro gallo hubiese cantado, pero bien sabemos que ocurrió lo contrario y tuvo su mercado meta que siempre le respondió.
Ese es otro elemento no desdeñable, que tampoco estuvo al alcance de otros.
Creo que el amigo Abdallo ha dado con la clave.
Cuando empecé a escuchar y a comprar discografía , todas las colecciones eran con Domingo: Rodolfo (boheme) , Otello , Turandot, Ernani , Traviata, Aida, Tosca, Chenier.... . Estos personajes se parecen los unos a los otros como un huevo a una castaña . Uno se pregunta como puede ser que sea el tenor total , O sea Alfredo, Don José , Otello , Cavaradosi...... y todos tan dispares.
A medida que vas ampliando el espectro, te das cuenta de que en algunos de estos roles , como mínimo , hay cantantes que lo hacen mejor que él. Que sí , que acepto que su voz es muy bonita y el timbre inconfundible pero quizás un poco de especialización , tipo Kraus , no le hubiera venido mal. No se puede jugar en todos los puestos del equipo.
Qué es un grande de la lírica , eso es innegable . Aunque ,para mí , no sea de los mejores reconozco que su legado va a ser muy difícil de superar.