Fuera de Alemania, a Corinna Harfouch la conocemos como Magda Goebbels en El Hundimiento. Pese a ser mayor que la original, su interpretación es la definitiva sobre este personaje. Muy conocida debe de ser en el país para grabarlo.

Hoy, "Madama Butterfly". Función de Glyndebourne (2018). Grabación de Mezzo. Dirige nuestro bien conocido Omer Meir Wellber. Cantan Michael Sumuel (Sharpless), un barítono con una voz horrenda, una mezo cuyo nombre no aparece en los títulos de Mezzo (Suzuki, muy bien), Joshua Guerrero (Pinkerton), tenor de voz no demasiado bella. Pero esta es una ópera "de protagonista". Muy "de protagonista". Tebaldi, Callas, De los Ángeles, Scotto, Freni (esta última, no en teatro) fueron intérpretes insignes en un pasado que ya parece lejano. Aquí tenemos a Olga Busuioc, que incorpora a la tan entrañable como desdichada Cio-Cio-San con una voz no demasiado poderosa, pero grata y timbrada, un canto muy matizado y un notable desempeño como actriz, con momentos verdaderamente emotivos. La producción, que sigue fielmente el libreto en lineas generales, presenta a Butterfly y Suzuki "occidentalizadas" a partir del segundo acto, algo que ya es casi tradicional, pero es lógico, pues Butterfly repite varias veces que ella es americana. Parece muy atenta a la dirección de actores, pero falla a mi juicio en el final. Curioso el detalle de que Pinkerton no abandona sus maneras cínicas ni siquiera en los saludos. En conjunto, una "Butterfly" lejos de lo memorable, pero totalmente asumible dentro de los parámetros actuales.

Ayer, "Le Roi d'Ys". Función de la Ópera de Wallonia (2008). Video de Youtube. Una bellísima ópera con una espléndida música abundante en momentos líricos, dramáticos y heroicos a cargo de un triángulo amoroso formado por Margared (mezzo), Rozzen (su hermana, soprano) y Milio (caudillo del ejército, tenor, enamorado de Rozen y anhelado por Margared). Karnac (barítono) es el jefe del ejército enemigo, y el Rey (bajo), padre de Margared y Rozzen, es quien da nombre a la obra. La cosa recuerda lejanamente al quinteto Amneris/Aida/Radamés/Amonasro/Faraón. El libreto propone valores tales como la valentía apoyada en la Fe, bastante distintos (desgraciadamente) de los actuales. Los cantantes, desconocidos en general, defienden aseadamente sus respectivos cometisdos excepto el "bajo" (o lo que sea) que interpreta al Rey, que es muy malo. El coro y la orquesta cumplen dsicretamente, así como el director. La producción se deja ver. En conjunto, recomendable.

Una de esas grabaciones históricas, de cuando podía juntarse a un plantel extraordinario para hacer una versión de absoluta referencia. Por cierto, me sigue faltando Arabella en mi lista de visionados y lo cierto es que me haría mucha ilusión poder verla en teatro.

Es una pena que en todas las grabaciones del gran Mayr que edita el sello NAXOS venga siempre incluido en el paquete el discreto tenor Markus Schäfer.

Me imagino que debe ser de la tropa del maestro Franz Hauk, a quien hay que hacerle un monumento por su labor arqueológica con el maestro de Donizetti.

Salvo Schäfer, el resto de intérpretes protagonistas son cumplidores. Aunque no sean las condiciones óptimas, por lo menos podemos escuchar estas rarezas. Muy estimable la orquesta de Hauk, aunque como de costumbre mermada de más en las cuerdas, aquí alejada de la concepción más bandística de otras grabaciones anteriores.

Otra de las muchísimas zarzuelas que duermen el sueño del olvido.

La chulapona está fuera del repertorio habitual de las compañías privadas, pero en el Teatro de la Zarzuela la he visto dos o tres veces con la producción -ya de solera- de Gerardo Malla.

Quizás la versión más jazzística que conozco de esta ópera; o dicho de otra forma, la menos clásica. En mi opinión la versión más interesante es la de John deMain.

¡Qué calor hace!

Se repite usted más que el ajo...