Una ópera interesante con la que parece se estrenó el nuevo edificio de la Ópera de Helsinki. Es larga y densa pero, desde luego, tiene su interés y me encantaría verla en directo. La grabación recoge un grupo de artistas locales que hicieron carrera fructífera en los teatros operísticos de Europa

Así, de primeras, una obra de carácter tan religioso como ópera y compuesta a finales de la década de los 90 del siglo anterior parece despertar en mi persona poco interés. Luego, paso de la letra y la música de Pierre Ancelin se nos aparece interesante y sorprendente.

En lo de Ramey como Monterone y Sparafucile digamos que a lo mejor fue pionera, pero quizás no la única en otros casos, que tal idea de esos paralelos intencionales.

En representaciones sí lo he visto, pero para ahorrarse un cantante. En este caso de una grabación de estudio, no creo que fuera el caso.

Resultó intencional.

Cito, que hace pocas semanas en el MET se hizo La Forza del Destino y resultó que el Marchese di Calatrava y el Padre Guardiano, estuvieron a cargo del mismo cantante, pero por cosas de la puesta en escena y un paralelismo buscado.

Finalmente, para que no se me quede en el tintero ya que se menciona a Sutherland y en la referencia anterior a Beatrice di Tenda, también cabe preguntarse si doña Joan se plantearía la Imogene, aunque fuese de estudio.

Si Pavarotti hubiese estado, habría sido una grabación de campanillas, pero ya sabemos la pereza de don Luciano por papeles nuevos y solo para una grabación.

Pero como dicen, el hubiera no existe.

Una pena.

Este es uno de esos casos en los que podemos diferenciar claramente entre lo que se supone que es un cantante con años de limitada carrera y otro de carrera legendaria. En 1978, Kraus era ya sexagenario (1927), mientras que la Sills, nacida dos años antes (1929), no es que demuestre estar en su mejor momento (ya ven que utilizo el eufemismo para no herir las sensibilidades de nadie). En cuanto al Rigoletto de Milnes, decir que no puede con el papel (mejor dicho, que nunca pudo con el papel).

Está claro que como Callas, Carreras o Di Stefano, Sills tuvo una carrera corta. Pero eso no quita ni un ápice a su grandeza, ya que con un material modesto, elevó a su arte a la categoría de lo imperecedero....bueno.....y eso de corta, ahora que lo pienso, es relativo: desde 1955, que hizo la Traviata con bastianini, hasta 1975 con i capuleti, van 20 años....Creo, más bien, le vino tarde el éxito.
En esta grabación está ya tocada y Kraus, con un modo de entender el canto más cerebral o reservón, conservó mejor su instrumento, también por la cuidada elección de su repertorio. Eso es un hecho incuestionable.

No le ponga usted años a D. Alfredo.

Cierto, son diez años menos. Mil disculpas.

Herbert von Karajan se adelanta a Gianandrea Gavazzeni en ese verano de 1962, ya que el italiano inauguraba la temporada de La Scala con la misma obra en diciembre. El elenco no es igual en cuanto a las damas (Leontyne Price y Giulietta Simionato en Salzburgo, por Antonietta Stella y Fiorenza Cossotto en Milan), mientras el de los caballeros se mantiene, exceptuando a Ferrando, pues la señora de Vinco pudo imponer a su marido.

Quizás una de las óperas del compositor menos interesante.

Pongo esta foto del Rigoletto pero la grabación remasterizada. Es de agradecer, puesto que estaba grabada en AAD y la calidad del sonido era regular, sobre todo en las grandes escenas de masas: saturación...y fritura.
Hacía años que no la escuchaba es un placer en todos los sentidos volver a encontrarme con este duque juvenil tan franco, animoso, tan vital y con esa voz que es Oro en polvo, que corre con una facilidad pasmosa por su exigente partitura. Un duque superficial - no sé si es algo intencionado del cantante o no - nada sentimental o romántico, pero de indudable atractivo. Todo lo que hace es de 10: desde el "questa o quella", "parmi veder" "possente amor..." y sobre todo, el acto III. Bravo maestro!!!! Un Duque histórico e imperecedero.
Como en la grabación de Kraus, él es la joya de su grabación, aunque yo veo otra joya más: el más impactante, rocoso, siniestro y hasta con su punto de ordinariez propia de su clase y oficio Sparafucile que puede escucharse: el de Marti Talvela: vocal e interpretativamente inapelable...Su "sorella" es la Tourongeau...con eso ya digo todo.

A Dame Joan Sutherland la recordaba peor. Cierto es que aquí y allá aparecen sonidos entubados en su centro, pero aún mantiene su Gilda como referencia en el plano estrictamente vocal. Me imagino que para una soprano que cantó Ophelia Esclarmonde o Alcina los gorgoritos de Gilda son pan comido, y esa es la sensación que me produce su escucha: la de una soprano vocalmente fuera de lo común, con una dicción más cuidada de lo que se pueda pensar en principio, con una caracterización elemental (en Gilda, se puede pasar - aunque se agradece a sopranos como la Scotto su fraseo, por supuesto -) y que se pasea por su partitura como sin nada. No es tampoco una Gilda inerte, aunque sí madura. En este sentido, es la Gilda-Flora de Trevélez de la discografía.

Al Milnes lo prefiero en su segundo Rigoletto. El forero Adballo dijo que "no pudo con Rigoletto" Mis conocimientos no llegan a tanto como para poder contradecirle o no con argumentos de peso, pero a pesar de todo, y de sus heterodoxias, hay en su papel interpretación y arriba es espectacular. Tampoco he escuchado a tantos Rigolettos como para poder tener una referencia comparativa....Cornell MacNeil tal vez.

Milnes lleva el Rigoletto a su terreno y medios.

Se respeta eso de que "no pudo con él", pero me parece muy extremo, pues tampoco es un producto discográfico, ya que lo cantó en no pocas ocasiones en teatro, a ambos lados del charco.

https://www.youtube.com/watch?v=1NkSC9N68w8

https://www.youtube.com/watch?v=hPa1HvsSnGE