Uf, muy elevado el debate. "Demasié para mi body" como se decía en los 80's. "Parsifal" para mi es ante todo, un monumento musical con poco parangón. Belleza, belleza y belleza. Esto fue lo que me cautivó de la obra, además de todo el misterio e interés que encierra todo aquello que refiere al misterio del Grial, el ciclo artúrico y demás, temática que es en la que se zambulle de pleno el argumento de la obra, a lo que añade interés las creaciones de un personaje maldito como "Kundry" y de un castrado frustrado como "Klingsor". Yo ya de Schopenauer, Buda, Duhkkha o como sea eso, no sé nada de nada. Sinceramente, nunca me ha interesado ir a más a la hora de disfrutar como un enano de "Parsifal" o de Wagner en general toda esa vaina; para mi "Parsifal" es como una exquisitez culinaria en la que hay un equilibrio perfecto de todos los elementos que me interesan para degustar una ópera: una orquestación celestial, unos coros de ensueño, unos solos estremecedores, unos preludios o interludios que son auténticas sinfonías, un interesantísimo hilo teatral que además es un bombón para cualquier escenógrafo, una exigencia de un cast solista realmente potente, etc. Luego está ese matiz especial de ser la obra final, cierre de toda la produccion wagneriana y la especial conexión que tiene con el festival de Bayreuth. Pero ya el añadido de temáticas medio místicas, filosóficas, nirvanas o el Cristo ario, o tal o cual... no lo he echado en falta nunca. Me gusta el plato tal y como me viene servido, y tengo la impresión que si añadiese más ingredientes, me lo cargaría. Lo de menos es que servidor, tenga ya su propia creencia y práctica religiosa, que es tan respetable como el que tenga otras o ninguna, pero en todo caso, nunca he terminado de visualizar que una obra musical escénica de repente venga a convertirse en una especie de credo adicional o alternativo al que la gente pueda tener. Y tampoco creo que inspire nada en tal lid. Uno escucha en Viernes santo la Pasión de Bach o ciclos corales de Victoria, y puede bien usarlos para sus uso y disfrute musical por su indiscutible belleza estética, que la contiene, pero también como herramienta para meditar, pensar, y... orar. Pero... no veo tal segunda función en una obra de la dimensión y características del "Parsifal", ni si quiera si seleccionamos el "Encantamiento del Viernes Santo" que se supone una creación musical de parte Wagner insipirada en el momento en que coincide la fecha que conmemora la muerte de Jesucristo con el renacer de las plantas, el florecer, el despertar de los animales; esté bien la idea, pero no es nada nuevo en el horizonte si de repente decimos que todo eso es el solsticio de verano, no?, que existe desde que existe el planeta... o entiendo que desde que existe tal y como lo conocemos hoy que lleva así... cuantos cientos de miles de años? No sé... sí sé que para los más doctos en Wagner, enfocar así las cosas, es decir quedarse con la obra musical y tratarla como unas óperas más, en vez de como "dramas musicales", "autos sacramentales" o "festivales musico sacros" es una especie de insulto al de Leipzig o sin llegar a eso, un trato inadecuado, incompleto o absurdo, que se queda en la cáscara de la nuez pero el fruto real nos lo perdemos, que es toda esa vaina filosófico-mística. Bueno... si es así, y es pecado al wagnerismo... yo... seguiré pecando. Nunca podré por lo tanto escribir un libro sobre Wagner (tampoco lo tenía en la agenda esto como tarea prevista en los próximos 70 años entre las 10.000 cosas que me gustaría hacer, pero bueno), pero qué quieren que les diga: uno lleva en su chepa ya 4 producciones en vivo del "Parsifal", además de varias en DVD, y sobre todo, más aún en escucha CD sin ver nada, y a día de hoy, sin duda, es una de mis 5 óperas dilectas, y diría que de mis tres... Igual la estoy disfrutando y valorando de forma inadecuada o incompleta?... pues... así seguirá; y ya sé que hay mucha tinta escrita, mucho libro que me ayudaría a... pero es que... tengo mucho Calderón, Delibes o G Marquez o John Grisham pendientes para esa parcela de tiempo que puedo dedicar a la literatura; la vida no es ilimitada y no da tiempo a todo.
_________________ Harmoniously, NICO
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