En tiempos, braveé a Villazón.

Más de una vez.

Más de un día.

Lo mío es aún más triste. Yo nunca he braveado a nadie.

Por favor, ¿se van a perder la Traviata de Ponselle porque el sonido es malo? ¿Qué clase de cobardía es esta?

Nico, escuche la furtiva lagrima de Caruso de 1904 (si es que no lo ha hecho) y no me diga que no ha valido la pena.

¿Poner reparos a la fritura? ¿Dónde vamos a parar? ¡Yo prefiero la fritura! (es que he recordado una escena en la que el snob de Frasier, que quiere impresionar a una señora, le dice que no es que ya tenga nada contra las películas subitituladas, es que le gustan los subtítulos).

No es ningún pecado mortal. En su primer CD de 2003 no está mal.

Puedo tirarme meses (meses) sin escuchar una nota de Wagner.

Luego cuando empiezo otra vez, no soy capaz de parar.

No lo he vuelto a hacer. De aquello hace ya más de ocho años.

Nada extraño. A Celletti, durante un lustro (1968-1973), le gustó más Domingo que Pavarotti.

Vergogna.

Más perversiones:

-Braveé a María Bayo su Susanna del Teatro La Zarzuela 1990.

-En algún determinado papel y viéndola actuar más que oyéndola, puedo apreciar a Mara Zampieri.

-Hice cola para que Cecilia Bartoli me firmara un disco y hacerme foto. Bien es verdad que mi ex cónyuge era fan irredenta y uno es un caballero.

Confiese ud. el mote con el que se refirió a Domingo durante muchos años antes de empezar a seguirlo, cuando canta peor que nunca, hasta para tragarse sus estafas baritonales.

No tengo eso tan claro, pero claro, no he leído todos los artículos que publicó en "Discoteca" en ese lustro.

Ese mote se mantiene antes (en plena trinchera del Krausismo militante) y ahora. Es cariñoso.

¡Qué barbaridad... ! ¡Ya van en la página 7!... Uno no los puede dejar de leer un rato...

Bueno, a ver...

Confieso...

1. No aguanto la ópera contemporánea...
2. Aunque la haya visto/oído mil veces, siempre lloro en el dueto "sono andati?" ... Y me cala el escalofrío cuando muere Mimí...
3. Disfruté más la Tosca y el Andrea Chénier de Luis Lima que los de Francisco Araiza en los 90's...
4. No me enteré de un concierto de Ramón Vargas aquí en Morelia... ¡Hasta el mismo día! (Ya no había entradas... Una vergüenza total).
5. Cada vez que voy camino a los servicios sanitarios me encuentro cantando "La pira"...
6. Me gusta el café con azúcar.
7. Extravié el video de la primera función de ópera a la que asistí en vivo... (Que grabó mi madre en VHS, como un recuerdo, el mismo día desde la transmisión de televisión).
8. Casi me infarto cuando me enteré del retiro de la Dessay.
9. Me aburre Massenet.
10. Me gusta como canta la Gheorghiu.

Va otra confesión: hace poco más de una semana, me acerqué a un punto limpio con un saco de VHS plagados de grabaciones de óperas, y en el gran cubo donde ponía "cintas, casetes, etc", lo tiré todo no sin lágrimas en mis ojos.

Cierto que es que me propuse la tarea de pasar todo ese material al disco duro del grabador de sobremesa que tengo (bueno, de hecho no pasé todo: lo que son funciones de las que existe producto comercial de fácil adquisición, pasé: de interesarme contar con ellas , ya me las compré o grabé, o bien compraré o grabaré desde un soporte digital, no cobraba sentido dejar en el disco duro la grabación de un viejo VHS deteriorado ya el pobre). Con todo, ha sido tanto tiempo, en los años de los VHS que he disfrutado con esos videos, que al tirarlos me he matado un poco ... pero es que en la vida hay que avanzar y lo cierto es que llevaban ocupándome el fondo de un armario varios lustros sin apenas tocarlos, y el espacio es necesario, además de muy caro. Ahora, darme pena? ya lo creo.

Si le digo a la mía que voy a hacerme una foto con De Niese, me arrea un sartenazo

Es que así no se hace, el truco es otro. Decir que se va a felicitar a un cantante y luego, ya de paso, en camerinos ir a visitar, fotografiarse con "la estupenda soprano que ese mismo día ha descubierto". Tiene su foto, los dos besos de rigor...Y el ceño de su señora, hasta que se le pase (que se le pasará pronto, si no cae en el truco). Igual, si lo hace bien, ni se cosca.