Esta semana he ido con el forero Arnold, a quien Wagner conserve en su gloria, a un concierto de música hispano/árabe en el Teatro de la Zarzuela, con la JONE (Joven Orquesta Nacional de España). La primera parte del mismo contenía canciones de Usandizaga, Chapí, Falla e incluso Debussy, todas referentes al embrujo de la Alhambra, como introducción a
Alma de Dios y
Reina mora, que se van a representar en breve. Un poco rollete esta parte y eso que me esperaba lo peor de Debussy. La orquesta a medio gas, demasiados instrumentos.
La segunda parte constaba de una pieza entera, de un compositor, según palabras del director, José Luis Temes, "semidesconocido e injustamente olvidado en el siglo XX": Pedro Miguel Marqués. Ya lo trajo a este hilo Loge, a propósito de la zarzuela
El anillo de hierro, alentada por joseluis, Gerardo y @lm@viv@.
De las cinco sinfonías que tiene, se eligió la tercera, en si menor. Me quedé anonadado (bueno, nos quedamos) por la belleza musical, en todos sus movimientos, con la orquesta -ya sí- a pleno rendimiento. El momento cumbre, para mí, el solo de violín, que tiene su dificultad, con trémolos, vibratos, staccatos... Magnífica. Cuando sonaban las cuerdas me parecía estar escuchando a Verdi.
Por desgracia no le he encontrado en Youtube, y me cuentan mis infiltrados en Spotify que allí tampoco está. Si alguien la encuentra, que nos la muestre.
Acabó la velada con una melodía fúnebre de Fauré (
Pavana), delicada, bonita y no demasiado fúnebre, quizás me haya acostumbrado demasiado a lo tétrico.