Las gnossiennes siempre me han parecido azules. De un azul marino tirando a violeta.

Como gotas de agua golpeando en un cristal... todo transparente.

No he visto la película, pero a mí esta música me sugiere color gris asfalto, de paseo matutino con olor a café y tostadas saliendo de acogedoras cafeterías. Comienzo de día prometedor.

Claramente comienza siendo un intenso amarillo floral, que adquiere en un momento tonalidades blancas, para después introducir una gama de verde hierba que, en un principio acompaña, para después invadirlo todo a la vez que se oscurece hasta hacerse casi negro. Hacia el final, espirales multicolores surgen de la maraña que se ha formado en un admirable juego de fuegos de artificio.

Hombre, cada Gnossienne tiene un color diferente. La número 1 es claramente violeta, por ejemplo. Pero la número 5 es de un naranja amarillento (que va cambiando tornasoladamente según evoluciona, claro está), un naranja amarillento iluminado por la luz de una mañana de comienzos de primavera cuando todavía se siente casi más el frío del invierno que el calor de la primavera.

Y el comienzo de lo de Mercadante es un suntuoso y aterciopelado burdeos.