Los miembros de la orquesta del Met debe haber tocado decenas de ocasiones esta escena, así que podrá ser el resultado mayor o mejor aún, pero siempre de primer nivel como en este caso.

El coro claro está, como siempre a la altura.

El señor Kelsey, repite su constante en este papel en el Met, de acentuar la frase "Suo padre" de manera distinta, como queriendo dar a entender un dejo de importancia a la relación filial, antes que a un afán de confrontación.

Por lo demás, sus formas estentóreas y directas, calzan bien con el papel de Amonasro.

La Sondra igualmente solazándose tanto con sus filados, como sus potentes notas en las alturas, que la hacen destacar en el ensamble, al igual que el señor De León que no se amilana.

El maestro Domingo con un cierre al principio como quien no quiere la cosa, pero luego metió al acelerador.

Un alarde voces potentes, rivalizando con la orquesta y el coro, saliendo ilesos.

Emocionante.

Vamos a otra pausa.

La Sondra cantó O patria mia, con su habitual compostura, más el ascenso al agudo en filado se le ensució, cosa que no es infrecuente en ella.

Más luego se recompuso y el cierre si le salió libre y cristalino.

Aplauso del respetable.

De nuevo el señor Kelsey se luce en las invectivas a su hija, gracias a sus formas un tanto toscas, aquí ideales, aunque trata de recomponer la línea en "Pensa che un popolo, vinto, straziato".

El señor De León sudando con las espinosas líneas del Nel fiero anelito, más el maestro Domingo, muy consciente y solidario lo ayuda.

Don Jorge de manera astuta encauzó el difícil agudo en la frase "il ciel de´nostri amori", que otros sin sonrojarse lo dejan en "amor."

La Sondra por su parte acariciando las notas y las frases, aunque al final una nueva pasada con nota final sucia.

El tenor por sus fueros en el Vieni meco, insiem fuggiamo.

Al igual que en el la bemol del Io resto a te, que resonó por toda la sala del Met.

El maestro Domingo que sabe los códigos de la ópera, deja lucirse a sus tenores, como aquí el señor De Léon en la frase "e vuoi ch´io viva?, merced a un si bemol prolongado.

La señora Petrova tampoco es dejada y no ha desmerecido ante el voceras De León.

Veremos si aún tiene arrestos para la escena del juicio.

Simpático como el señor Kocán, destaca la "s" final en cada Radamés.

Por su parte la señora Petrova dio una vibrante réplica al coro y a Ramfis, con un seguro y prolongado agudo en Anatema su voi!

El maestro Domingo de nuevo con una curiosa coda.

Otra concesión para el señor De León con una frase expansiva en "Tu, in questa tomba!, frente a la compostura siguiente de doña Sondra.

Doña Sondra saliendo avante en los filados iniciales de O terra addio.

El señor De León … no puede … pero tampoco revienta las notas.

La Sondra es solidaria, así que canta "si schiude il ciel", al modo del señor De León, para no desentonar.

No lució mal.