Anticipando un poco el viaje a Valencia por motivos profesionales y aparecer por Les Arts para presenciar este GRIMES que a priori y con esta orquesta/coros, hacía presagiar un notable acontecimiento de teatro operístico, como así ha resultado
Ante todo y como siempre la acogida amigable de una representación de esta Peña valenciana que es envidiable en cuanto a saber disfrutar de lo operístico y no operístico, hoy con Mandryka y Dufol, éste además como asistente al espectáculo compartido. Seguid asì y espero encontrarnos de nuevo ( ¿ Esta vez en el Chenier liceístico próximo marzo ?
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Del GRIMES, poco a decir de lo ya manifestado y expresado por anteriores foreros asistentes
Con esta Orquesta y Coros ( desde luego y de largo, lo mejor del panorama operístico español ), se disfruta de todos sus géneros y de los diferentes períodos incluso
La producción de Decker, extremadamente teatral y muy trabajada escénicamente por muchos años que lleve en el candelero. Profunda, descarnada en bastantes instantes, esquizofrénica también por lo que representa a su protagonista sobre todo, nada recargada y con lo típico de Decker ( recordar su Traviata del " reloj " y su Werther del Real y Liceo ), esa escena en pendiente con el castigo físico para los solistas
Orquesta con una dirección algo exageradamente en forte en alguna escena, pero con un sonido penetrante y envolvente, además de dejar unos interludios o escenas musicales excelentes, sin descuadrarse en ningún instante
Coros, marca de la casa : excelentes y da gusto escucharlos.
Kunde pese a su voz ya conocida áfona y mate en centro y graves ( escasos ), despliega a partir del paso una muy notable proyección vocal. Tiene el rol dominado y como es un artista que nunca aburre con sus interpretaciones, crea un más que notable y paranoico Grimes
De las veces que más me ha convencido Kunde como cantante/intérprete ( por tipo de voz actual, algo me ha recordado al otrora Grimes de J. Vickers, otro tenor también de cierta voz áspera ).
No se entiende que con la escasez tenoril actual, no se le brinden oportunidades a Kunde ya desde hace años en sus propios USA
La Partridge como Orford ( se pidió benevolencia al inicio, por presunta indisposición ) , mejor artista y más expresiva escénica que vocalmente. No es una soprano lírica spinta, le falta algo más de peso vocal y tiene tendencia a abrir y a crispar sus agudos; no obstante y en las partes más intimistas, mantiene una buena línea de canto
Bien y muy seguro el Balstrode del barítono Robert Bork, señorial en su personaje
Del resto de cantantes, más que correctos en general ( en especial el Boles de R. Cox ) salvo para mi la decepción de la veterana Rosalind Plowright muy cascada y escasa consistencia vocal
bastantes huecos en el Palau, pero la tensión de esta partitura con dos últimos actos bastante impactantes ha provocado muchos bravos y merecidos al final