mitchum escribió:
respecto a lo que decían Yago y Supermaño. es que cantar Violetta no es cantar Elvira. la exigencia técnica de la segunda es muy superior.
Esta afirmación a mí me parece en exceso categórica e incluso temeraria, ¿no cree, don Mitchum?...
Sobre todo teniendo en cuenta que son bastantes las sopranos que consideran a Violetta, junto a Norma, las dos cumbres inaccesibles del canto sopranil italiano, si no se tienen los fundamentos técniso bien asentados. Y aún así
. Otra cosa es que Violetta permita salir a flote (ante un público poco ducho, eso sí) echándole unas gotitas de desparrame y de énfasis dramático, y eso con Elvira es imposible, puesto que sólo se puede asumir desde la pura vocalidad (expresiva, pero vocalidad).
Y retornando al hilo de esta historia, yo debí de estar distraído y no percibí el acontecimiento memorable que tenía lugar ante mis ojos, porque salvo Camarena, el resto del reparto me pareció un desecho de tienta. Damrau está para el arrastre (de su amante esposo, ni hablamos), y Tezier es aburrido y vulgar hasta decir basta. El canto belliniano le sienta a este hombre como a un Cristo dos pistolas. Por contra, yo soy de los raros a los que no le disgustó la dirección de Pidó. Lo de Camarena es otra historia: buen gusto, elegancia y sabiduría para amoldarse a la particular ondulación de la melodía belliniana, aunque a mí me sigue pareciendo que la manera de emitir los agudos (con demasiada presión nasal) hace que, en algunos casos, parezcan como encapsulados o "aplastados por los polos"
.(
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