Un barítono de ¿74 años?. Una soprano local, aunque afincada desde siempre en el extranjero. Un grupo acompañante formado por un cuarteto de cuerda, piano y arpa. Un programa anclado en las más rancias esencias del SCR. Y un público que ha aplaudido, ha braveado, se lo ha pasado en grande y se ha sentido feliz durante un espacio de tiempo que se ha hecho cortísimo. Es el poder, la belleza, el atractivo magnético de la ÓPERA con mayúsculas, ajena a las soplapolleces escénicas con que nos bombardean, y ante las cuales nos creemos en la obligación de decir que "no molestan", cuando nuestro íntimo deseo, no confesado en aras a la corrección política, sería pegarle una patada en el culo al autor del desaguisado. ¿Debe entenderse entonces que la velada que ha tenido lugar hoy en el Palau de la Música de Valencia ha sido de una calidad artística excepcional? Nada más lejos de la realidad. Pero ha tenido la virtud de "sonar", "saber" y "oler" a ÓPERA.
1ªParte.
- Il Barbiere di Siviglia: "Largo al factotum" - Il Trovatore: "Tacea la notte placida" - Don Carlo: "Per me giunto é il di supremo" - Un ballo in maschera: "Morró, ma prima in grazia" - "Le donne di Donizetti" (Fantasía orquestal sobre temas de "Don Pasquale", "Lucia" y "Anna Bolena") - Il Trovatore: "Udite? come albeggi" 2ª Parte.
- Pagliacci: "Stridono lassú" - Andrea Chenier: "Nemico della patria" - "Notturno de Falstaff di Verdi" - La Traviata: Madamigella Valery?
Propinas:
- Rigoletto: "Cortigiani!" - Manon Lescaut: "In quelle trine morbide" - Rigoletto: "Vendetta" - Rigoletto: "Vendetta" (bis) - "Non ti scordar di me", cantada a dúo, bailada y finalmente coreada por el público. Sí, sí, hoy he cantado.
Pongámonos rigurosos (odio lo de "serios"): Nucci está mayor, la voz pierde quilates en la octava inferior, pero la superior es magnífica, y el agudo, un trueno. El fraseo tiene amplitud y expresividad sin recurrir nunca a exageraciones. Tiene eso tan indefinible que se llama "acento verdiano". Su versión de la muerte de Posa ha sido extraordinaria, con un "Ah, la terra mi manca" escalofriante. Y tablas, muchas tablas. Sabe cómo meterse en el bolsillo al público, con la total conformidad de este.
Isabel Rey, soprano valenciana, pero "tedesca" por adopción, ha sido para mí una sorpresa, al abordar un repertorio a caballo entre Verdi y el verismo con desenvoltura vocal, volumen más que suficiente, agudos timbrados y perfectamente afinados (excepto uno, algo destemplado) y notable desparpajo escénico (todos los fragmentos, especialmente los dúos, se han escenificado discretamente). Me ha gustado especialmente en Violetta.
En resumen: Una gozada.
Edito porque creo de justicia destacar el buen rendimiento del Italian Chamber Opera Ensemble, un grupo de cámara que acompañó muy bien a los cantantes (permitiendo que en todo momento estuvieran cómodos) e interpretó con musicalidad los dos fragmentos orquestales, preparados por el pianista del conjunto Paolo Marcarini.
Última edición por joseluis el 11 May 2016 14:58, editado 1 vez en total
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