Después de más de 10 años vuelve al Teatro Real este drama verdiano, aunque en versión de concierto. En diciembre de 2005 vimos sobre el mismo escenario una versión escenificada que hizo las delicias del público, con unos Marcelo Álvarez y Fiorenza Cedolins que hicieron una interpretación maravillosa. Yo que iba al Teatro pensando "otro rollazo pre-Trilogía con ínfulas de belcanto" (tenía 18 años recién cumplidos, qué podía esperarse) y salí en una nube con la representación.

Una década más tarde he vuelto a esta partitura y también he vuelto a salir feliz del teatro. Pero esta vez ha sido un reencuentro y descubrimiento al mismo tiempo de la obra. Si ésta es una obra menor y casi olvidada, la inspiración y la tensión que se palpita en cada escena realmente consigue enganchar al público y hacerle pasar tres horas que se pasan en un suspiro. Páginas como la obertura, la entrada de Luisa, el final del primer acto, la bellísima Tu Puniscimi del segundo acto, el cuarteto a cappella o el final del segundo acto, el momento de Laura con el Coro, los dúos... ¿para qué seguir enumerando si la conclusión es repetir que la obra es una poco conocida joya?

Esta versión de concierto fue capitaneada por un James Conlon que dirigió a la orquesta con verdadera agilidad y dramatismo, sacando de la misma un sonido bellísimo. Verdi estaba presente en la sala. Las cuerdas volvieron a sonar maravillosamente, la percusión estaba maravillosa ... esperemos que el maestro vuelva pronto con otra obra del de Roncole. El coro estupendo.

Los cantantes rindieron en mi opinión al máximo, siendo una verdadera fiesta vocal. Y además se movían con libertad por el escenario y además actuando. Incluso en la escena final hubo un elixir que los protagonistas bebieron.

Lana Kos interpretó a una Luisa mejor de lo que esperaba: buena voz, coloratura agradable y agudos bonitos. Vincenzo Constanzo tiene buena voz aunque me pareció que fue de más a menos. A partir de su famosa aria Quando le sere al placido en adelante estuvo muy bien, igual que en los dúos con Federica. La condesa fue interpretada por una María José Montiel que cantó bellísimamente y con unos graves de impresión. John Relyea fue un Wurm excelente, pero me pareció algo pastosa la voz sin quitarle mérito. Dmitry Beloselskiy fue una revelación: una impresionante e impecable voz de bajo que hay que seguir. Mención a Marina Rodríguez-Cusí como una agradable Laura.

Tenía ganas de escuchar por fin al gran Leo Nucci en una ópera completa. Desgraciadamente para mí no pude verle el año pasado ni como Germont ni como Rigoletto. Bien es cierto que Miller no es el bufón pero Don Leo se nos volvió a lucir: la voz aún es fuerte y con unos agudos tremendos. Sí, tiene limitaciones propias de su edad pero sigue llevándose de calle a la mayoría de barítonos verdianos que haya visto en los últimos años. Por no hablar del volumen que aún es capaz de medirse al tú al tú con una orquesta detrás de él y de las tablas. No dejó de actuar en ningún momento ni de transmitir angustia o sufrimiento propios del personaje.

En definitiva una vibrante noche de ópera. Y con una puesta en escena habría ya sido un éxtasis total.

A ver si en estos días dejan más impresiones de estas dos únicas funciones ya que no soy el más indicado para hablar en profundidad de esta ópera, con la que he tenido una feliz sensación de reencuentro.

Lo que más me gustó fue la orquesta. No estaba en mi mejor día, pero las voces me dejaron bastante frío. Me gustó mucho la Montiel. Nucci (es la quinta vez que le oigo en directo) nunca me ha gustado. Los demás, flojos. Lo dicho, lo que más me impresionó fue Verdi, y su materialización en la orquesta. También asistí a la representación con Cedolins y Alvarez y larecuerdo como una función mucho más redonda.

Sí, el trabajo de Conlon con la orquesta muy destacable y un buen pulso "verdiano", pero yo la habría colocado directamente en el foso, porque aunque el ímpetu nunca faltó sí quizá un poco más de contraste en pasajes que hubieran quedado mejor con más suavidad, sobre todo teniendo en cuenta las grandes carencias de las voces de los protagonistas (Kos y Constanzo), así como para facilitar los movimientos de los solistas en estas versiones concierto que afortunadamente se van extendiendo, donde ninguno lee partituras y se esmera en la interpretación también a nivel gestual.

A nivel cantantes, para seguir destacando lo positivo, diría que Nucci estuvo muy comedido y bastante bien, y muy interesante Beloselskiy, gran material y técnica y además no canta nada mal, un poco más de legato y de fraseo para haberlo bordado.

Leyendo sus crónicas llega uno a la conclusión de que la Orquesta del Real ha alcanzado un buen nivel cuando parece responder con interpretaciones de altura cuando la "agarra" un buen director, como puede ser Conlon y Bychkov en el actual Parsifal. Quizás la estrategia de Mortier para los cuerpos estables haya dejado más rédito del que parecía. Por cierto, y mezclando hilos, el coro en Parsifal también me ha encantado.

una "Luisa Miller" más que disfrutable.

tres nombres propios: Conlon, Nucci y Beloselskiy. el primero, por llevar con nervio y viveza la batuta, que yo noté quizás algo morosa en los primeros compases de la obertura, pero que luego fue briosa y vívida. además, acompañó a todo el reparto con notable respeto. Nucci, porque vive los personajes que canta, y como indica Jane estuvo bastante comedido. la edad se nota, y así tuvo un pequeño traspié en la cabaletta de su escena, entrando un poco tarde y falto de aire en las últimas frases. colgó un Lab del techo para desquitarse. y el bajo, quizás el mejor cantante de la noche, matizando su interpretación, aunque el fraseo en los rusos siempre va de aquella manera. a mí me pareció un cantante notable.
Lana Kos. pues bueno, la voz no es especialmente bonita, pero cantó con entrega su parte, resolvió las agilidades del primer acto y supo acometer las partes más dramáticas del resto de la partitura. la Luisa tiene un algo de Violetta. bien, sin más. no entusiasmó pero tampoco fue para echar a correr, algo que sí podría decirse del tenor, verde como el trigo verde. la voz está por madurar. el timbre evoca ligeramente a Grigolo, intérprete con el que Vincenzo Costanzo comparte alma y espíritu sanremero. el agudo, sin resolver, empujando a las buenas de dios, con cambios de color, sin brillo. se salvó por el aria, que debe tener machacada a recitales. pero su Rodolfo fue insustancial.
y Relyea es una voz de bajo pilórico, porque es por el píloro donde la fabrica. estuvo y punto.

fabulosa producción, por cierto. realista y preciosista. y barata!

¿ Lana Kos, puede cantar la L.Miller ? Yo le hacia como máximo, una Gilda y evidentemente, poco o casi nada verdiana ( aunque hace ya de eso, unos años ).
Supongo que habrá aprendido de Giancarlo del Monaco

Efectivamente estoy de acuerdo en lo que manifiestan. La orquesta efectivamente ha sonado en estas óperas mejor que en las dos últimas temporadas, la explicación es la dirección musical, pero me parece que es la última oportunidad junto al MACBETH del año próximo que dirige Colom, es lo último que queda del modelo Mortier, tan criticado sobretodo por los aplaudidores de López Cobos, pero al final la razón se impone.

Desgraciadamente se ha decidido volver al director musical mediocre e invitados todavía peores, vamos al mejor estilo López Cobos, tedio, tedio .......

Para que una versión concierto transmita emoción tiene que ser semiactuada como en esta ocasión, sin partitura , sillas y otras zarandajas. Las voces de la edad de Nucci , mejoran en versión concierto al verse descargadas del esfuerzo que siempre produce una actuación escénica.

Me extraña mucho que nadie se " deshaga " en elogios para la correcta actuación de Lana Kos, pareja por cierto de Giancarlo del Monaco, y que a su " defensor" Gonzalo Alonso, el que quería que hubiese sustituido a Moral y que le enfrentó con Mortier , se ha atrevido a decir en beckmesser.com que esta señorita es equiparable a Moffo, Scotto, Anderson o Millo, lo que hace la " amistad" y la falta de conocimiento de la " crítica bienintencionada "......

pues si nadie se deshace en elogios a la señorita Kos es porque no lo considera oportuno.
empieza a cansar su teoría de la conspiración perenne, oiga. que a algunos no nos dice nadie lo que tenemos que decir, ni siquiera cobramos dinero de los cantantes para hablar bien de ellos (como hacen otros).
¿está llamando mediocre a James Conlon?

Sr. Mitchum he dicho QUE ESTAS DOS OPERAS HA SONADO MEJOR LA ORQUESTA QUE EN LOS DOS AÑOS ANTERIORES, COLON FUE CONTRATADO POR MORTIER , LOS MEDIOCRES SON LOS QUE TRAEN BOLTON Y MATABOSCH.

En cuanto a la conspiración que tramaron sobretodo Gonzalo Alonso se necesita narices para no verla. Al citado Sr. parece ser que se le ha olvidado la contabilidad del Real, su obsesión en la época de Mortier y que ahora se regalen entradas, se bajen precios de entradas, le importa un bledo, Sr. Mitchum observe y recapacite.......

yo no tengo nada que recapacitar. he expresado mis diferencias respecto a la programación artística del Real de cara al cacareado bicentenario.
sobre la cuestión presupuestaria, es cierto que Matabosch no trae la mejor trayectoria a la vista de cómo ha acabado el Liceu, rogando por un rescate extraordinario. pero para juzgar su labor actual hay un Patronato que deberá ver si les complace o no la gestión de los números.
bajar los precios de las entradas nunca me parecerá criticable, en todo caso. ¿no queremos que esto sea popular?

Mas que disfrutable opera la escuchada el sábado 23 en el Real, a pesar de que aborrezco las versiones concierto; se agradece el esfuerzo de los cantantes semiescenificando la accion. Notable el director, el coro y la magnifica orquesta que realmente sono bien la otra noche. En cuanto a los cantates correctito Costanzo como Rodolfo, con una voz fresca y lozana a pesar de que este aun sin pulir y sin rematar nada de nada, pero hay material bonito. Lana Kos cometio con dignidad su parte dandonos una Luisa de buen nivel; Nucci muy convincente; de hecho ha sido la vez que mas me ha gustado. En los concertantes se le oia mas bien nada, pero en el duo con Luisa tuvo momentos mas que memorables. Ambos estuvieron basante bien en una de las partes mas logradas de esta opera. Magnifico el conde de Beloselskiy, una voz desconocida para mi pero que me sorprendio muy agradablemente. Montiel correcta con unos graves algo exagerados pero impactantes; algo gazmoña en su interpretación, eso si.

Ayer pude disfrutar de esta ópera y mis impresiones son muy positivas en cuanto al director y orquesta y agridulces en cuanto a los cantantes. Creo que el hecho de que la orquesta esté por un lado siendo dirigida por Bychkov en el Parsifal y ahora también por Conlon en esta Luisa está teniendo un efecto sinérgico muy positivo; pocas veces me ha sonado así de bien. Ojalá Conlon viniera más a menudo. En este sentido Matabosch ha hecho una buena elección de directores y en esta ocasión hay que reconocérselo.

En cuanto a los cantantes, me siento un poco confundido con Constanzo; su voz me gusta, la encuentro muy “italiana”, me parece un buen fraseador y es comunicativo. Sin embargo, como ya se ha comentado, el papel le viene grandísimo y tiene muy serios problemas en las partes más intensas y dramáticas de este papel o cuando tiene que subir al agudo, que ayer le hizo sufrir y muchísimo. En las subidas al agudo el sonido se estrangula, se afea, la emisión es apretadísima. Por eso en la famosa Oh Feder negar potessi… Quando le sere al placido, alternó momentos en los que mostró impotencia vocal y muchas limitaciones, pero también en las partes más líricas y poéticas, cantó con mucho gusto y sentimiento. El cantante se entregó al máximo y es de agradecer. Pero a mi todo esto me apena, pues me temo que se está cargando su voz.

En cuanto a Lana Kos, a mi ayer me decepcionó bastante. No pude evitar recordar a la Cedolins que vimos hace unos años también en el Real, y no sé si es que los recuerdos los tengo distorsionados pero sencillamente aquella Cedolins (antes del declive vocal que por desgracia tuvo después) me pareció que estaba a años luz de lo que escuché ayer. Creo que el papel de Luisa requiere una voz con una zona central más robusta que el de la señora Kos; su voz me resultó escasa para el papel. El agudo por otra parte a veces es desabrido y el timbre no me resulta nada atractivo. Pienso que en la función de ayer no rindió como en la del día anterior por los comentarios que he leído aquí. Quizás esperaba una soprano en la línea de Sonya Yoncheba, que me gusta bastante, y me quedé bastante decepcionado.

De los demás nada que añadir a lo ya dicho, salvo insistir en que Nucci, con todos los defectos que se le quieran poner, sigue teniendo un carisma y un impacto en escena que para mi sigue siendo muy muy atractivo. Me gana por la vía emocional y la sabiduría dramática.

No es mala cosa acabar la semana con Wagner y empezar la siguiente con Verdi..... para mí, la noche tuvo dos triunfadores: Conlon y el bajo ruso Dmitry Beloselsky; Nucci el más braveado

Sr. Nacho estos dos directores junto al de LA CIUDAD DE LAS MENTIRAS del año próximo son las últimas direcciones musicales que dejo contratadas Mortier. Colon fue contratado por tres años, queda el MACBETH del año próximo. También había un acuerdo por 5 años con Muti, que ha quedado en agua de borrajas, Don Joan sabrá los motivos......

Para mala suerte de los aficionados hemos vuelto al modelo " López Cobos " , director musical mediocre e invitados a juego, es decir tostón, tostón.....

Esperemos con interés lo que puedan aportar Afkham y Heras-Casado, que den un aire nuevo sino nos espera unos años malos en cuanto a los cuerpos estables.

Mortier sabía demasiado de como llevar un teatro de ópera y lograr los máximos resultados en cuanto a la calidad de los cuerpos estables, desgraciadamente se ha decidido ,por incompetencia , cambiar el modelo y recaer en errores del pasado.

De todas formas el " respetable " y la " crítica bienintencionada " no se entera o no quiere enterarse....

Ufff. Qué cansino me parece todo esto de estar siempre a vueltas con Mortier, sobre todo porque el sr Mortier , guste o no guste ,ya no esta en este mundo y eso no tiene remedio.
Totalmente de acuerdo con Nacho sobre lo visto anoche en el Real.