Efectivamente, en el programa constan los teatros coproductores: Aix, MET, Finnish Opera, Unter den Linden y Liceo. Amo este teatro y me siento una especie de Liceísta adoptado, pero la verdad, tal y como está la orquesta ahora mismo y teniendo en el oído lo de Dresde y lo de Milán, muy bien se tienen que poner las cosas para que vaya a verla a Barcelona.
Olvidé mencionar las viejas glorias que se encontraban entre los secundarios de esta Elektra Scaligera: Donald MacIntire, Roberta Alexander y Frank Mazura.
Personalmente, pienso que la asunción por parte de una voz de hechuras eminentemente líricas como Nina Stemme (una Crisotemis clara, neta y nítida) del papel de Elektra es un nuevo paso hacia el suicidio vocal y además, para nada, ya que estando en giro actualmente la Hertlizius (inatacable bajo cualquier punto de vista) o voces más genuinamente dramáticas como la Theorin, poco va a poder aportar al papel que compense el daño.
La Pieczonka es una soprano que me gustaba. Bien es verdad que llevaba sin escucharla en directo desde la Ariadne Liceísta del año 2002, pero su Crisotemis me ha resultado un pequeño fiasco. Plana tanto en lo vocal como en lo interpretativo y ese centro que era cremoso y consistente, ha desaparecido o, al menos, no lo escuché el pasado Viernes en la Piermarini.