Eminencia Pálida escribió:
La producción estuvo hecha con forzosa economía de medios: honesto cartón piedra en interiores y proyecciones para representar la campiña suiza. Intentaba, y creo que conseguía, informar a los espectadores que el primer acto estamos en una palacio ruso, en el segundo en un salón parisino durante la Belle Époque y en en tercero en una casa de campo. Y, dentro de su relativa modestia, resultó agradable a la vista y realzó los sucesos que acaecían en escena. Felicidades a Daniele Piscopo por no intentar colarnos una historia paralela. Eso sí, mi vena pedante no me permite obviar un pequeño gafe histórico: el cuadro que en primer acto supuestamente representa al finado Vladimir Andreyevich es una copia de un retrato juvenil del zar Nicolás II, que en la época en que está situada la acción estaría muy ocupado en los jardines de infancia de palacio (en el segundo acto de la ópera se menciona el asesinato de su abuelo).
Leer forzosa economía de medios, honesto cartón piedra y modestia en la misma frase ya me echa para atrás. Hay que GASTAR una parte del presupuesto en producciones, carajo. No puede ser el 5% del presupuesto. No confundamos hacer un montaje clásico con esto, que a todas luces parece un montaje pobre. Son cosas distintas. El tiempo del cartón piedra, el coro dispuesto en formación sin moverse y los cantantes en la corbata del escenario abriendo bien los bracitos porque no hay dirección de actores debería haber pasado hace tiempo.